El Morabit: "Para un terrorista el juicio es la mejor oportunidad de defender su ideología" porque "es lo que busca"

LD (Agencias) El presunto colaborador de la célula que perpetró el 11-M, el acusado Fouad El Morabit, aseguró este martes en el juicio por estos hechos que cuando ocurrieron los atentados "inmediatamente, como otros ciudadanos, pensé que era ETA". De este modo ha vuelto a negar, tal y como hizo esta mañana, haber relacionado el 11-M con uno de sus presuntos cerebros, que se suicidó en Leganés, Serhane Ben Abdelmajid, "El Tunecino"; a pesar de que ante el juez Juan del Olmo dijo que otro de los acusados, Basel Ghalyoun, le había advertido que el presunto líder de la célula tenía intención de hacer "algo muy fuerte" como un atentado, aunque nunca lo relacionó con lo de Madrid. El Morabit ha dicho que pensó que se trataba de un intento de decir que “era mejor vivir cerca de donde habían nacido” que no en Europa, “esto es propio de una ideología”.

"Nunca lo relacioné porque es imposible relacionarlo. Serhane no es una persona con contactos para relacionarlo con los atentados",insistió El Morabit, que condenó "rotundamente" estos atentados, que son "una barbaridad". En este sentido afirmó que si fuera terrorista reivindicaría la autoría de esos atentados porque considera que lo que buscan es proyección internacional y este juicio sería una buena oportunidad para conseguir esa proyección. El Morabit: "Para un terrorista ésta es la mejor oportunidad de defender su ideología. Es lo que busca un terrorista”.

 

Sostuvo además que "El Tunecino" "no es una persona violenta". "Era radical, podríamos decir extremista, pero no violento. Manifestaba sus ideas de manera radical, muy entusiasta, como si quisiera imponerlas, pero nunca llega a la violencia. Tampoco se le conoce que forme parte de algún grupo o perteneciera a algo que le pudiera relacionar con una acción terrorista", destacó.

El Morabit, quien fue encarcelado el 12 de abril de 2004 tras dos detenciones anteriores el 25 de marzo y el 2 de abril, habló también, a preguntas de una acusación, de una comida el 3 de abril de 2004, día en el que se suicidaron siete terroristas del 11-M en Leganés, en casa del acusado Mouhannad Almallah con dos periodistas del diario "El Mundo" que se habían interesado por las detenciones de ambos, ya que Almallah también quedó en libertad la primera vez que fue arrestado.

Sobre la noche del 10 al 11 de marzo de 2004, señaló que no tenía recuerdo porque "cuando las cosas van normal y corriente no tengo por qué tener recuerdos precisos de esa noche" y sobre la hora de llegada de Ghalyoun a la vivienda que compartían estimó que no debió ser más allá de la una de la madrugada porque "sería llamativo y me preocuparía por saber si le ha pasado algo". 

 

 

El Morabit, contradijo la coartada de Ghalyoun, al decir que el 11 de marzo de 2004 no vio a su compañero de piso hasta las once de la mañana. Tras el receso para comer, rectificó y aseguró rezaron juntos a la hora en la que explotaron los trenes. Según explicó ayer el acusado de colocar las mochilas-bombas en los trenes de cercanías, la mañana del 11 de marzo despertó a su compañero sobre las siete y media de la mañana para rezar. No obstante, El Morabit aseguró hoy a preguntas de la fiscal que no vió a Ghalyoun hasta las once de la mañana. A preguntas de su abogada, Eva Aragón, El Morabit rectificó esta versión y dijo que ese día rezó junto a su compañero pasadas las seis de la mañana y que volvió a verle cuando le despertó alrededor de las diez.

 

"A Basel le conozco a la perfección y no puede ser que esté implicado en los atentados, lo tendría que saber. Si él esta implicado yo también tengo que estarlo", aseveró El Morabit.

Recalcó que su fe musulmana no es compatible con los atentados y manifestó que no tiene "ni la más mínima" relación con la masacre, y, a preguntas de su defensa, Eva Aragón, dijo: "Si por el mero hecho de conocer a gente (relacionada con el 11-M) se me tiene que implicar, es que en Europa no se puede vivir. Mejor que me vaya a Marte". A Rabei Osman El Sayed, "Mohamed El Egipcio", con quien, según dijo en su declaración por la mañana, llegaron a tener un "nivel de amistad", lo definió como una "persona torpe" que hacía las cosas "sin cierta cordura" y "sin reflexionar" y recordó que "se precipitaba a sacar conclusiones e incluso a fantasear" sobre determinados asuntos.

La Fiscalía considera que la detención de Abu Dahdah, en noviembre de 2001, fue la que motivó la preparación del 11-M aunque fue un mensaje de Ben Laden, en octubre de 2003, el detonante de la masacre. Pese a esto, ninguno de los dos está procesado. El procesado también ha negado que entregara dinero a otros procesados o los suicidas de Leganés para financiar actividades terroristas. Sí que ha reconocido que "El Tunecino", uno de los supuestos suicidas de Leganés, le ofreció participar en la "guerra santa", pero que él lo rechazó. Le ha definido como "violento" y "radical". También ha admitido que conoce a "El Egipcio", al que ayudó a organizar su boda, y que es simptizante de los "Hermanos Musulmanes", considerados una organización terrorista en Egipto. 

 

Almallah Dabas fue detenido en marzo de 2004 y quedó en libertad tras prestar declaración ante el juez Del Olmo el día 30 de ese mismo mes. Entonces quedó imputado por un delito de colaboración con organización terrorista y se consideró que su única implicación era haber alquilado una habitación a Basel Ghalyoun, considerado uno de los presuntos autores materiales del 11-M, en un su local de la calle Virgen del Coro de Madrid, en el que también vivía Fouad el Morabit (también procesado por pertenencia a banda armada).

 

Casi un mes y medio después de quedar en libertad, Mouhannad Almallah Dabas se afilió al PSOE en la agrupación madrileña del barrio de San Blas, el 12 de mayo de 2004. El partido le expulsó tras hacerse pública su segunda detención, en marzo de 2005. Según ha explicado a preguntas del abogado de la acusación de la AVT, tradicionalmente su familia ha estado afiliada a partidos socialistas de Siria, desde hace 30 años, y él hizo lo mismo recomendado por el representantes de los Hermanos Musulmanes en España. "Me preguntó si tenía la nacionalidad española y al ser así me animó a afiliarme. En la misma semana fui, me lo aceptan y me dan hasta una tarjeta. Eso fue simplemente porque varias veces he votado a este partido". El presidente del tribunal no ha dejado a la letrada que terminara de preguntarle qué dos personas avalaron su entrada en el PSOE.

 

Almallah se ha declarado "contrario a toda violencia" y ha responsabilizado a su ex novia, "que me quiere hundir", de algunas imputaciones que se le han hecho. Vestido con traje de chaqueta de color verde oscuro y corbata, cabeza rapada y perilla, ha dicho que su ex novia "es una enemiga, y me ha denunciado muchas veces, si quieres luego te lo cuento", le espetaba a la fiscal.

 

Tras su declaración ha comparecido ante el tribunal Fouad el Morabit, también acusado de pertenencia a banda armada y también con una petición de pena por parte de la Fiscalía de 12 años de cárcel. Estuvo viviendo en la calle Virgen del Coro, que alquilaba Almallah y que compartía con otros procesados por la masacre.

 

Ha reconocido que tenía relación con "El Tunecino" y que estuvo con él un día antes del 11-M. También ha apuntado que nunca tuvo conocimiento previo de que se fuera a cometer un atentado en Madrid. El Morabit admitió ante el juez instructor, Juan del Olmo, que fue su compañero de piso, Basel Ghalyoun, quien le dijo que había oído por boca de "El Tunecino". que iba a pasar "algo fuerte en Madrid". Este martes ha explicado ante el tribunal que tomó dichas afirmaciones como "fantasías o tonterías" de "El Tunecino", que solía decir "cosas raras".