L D (EFE) El presidente del Gobierno mantiene el mutismo tras la manifestación del sábado en Madrid, que le recordó que con ETA no se negocia, a ETA se la vence. El silencio del Gobierno lo rompió Moraleda el mismo sábado, cuando aún no había terminado la marcha convocada por el Foro de Ermua. El secretario de Estado de Comunicación ya sentenció entonces que la protesta era "contra el Gobierno". Desde entonces, en el Ejecutivo han tratado de pasar por alto el 3-F y han evitado hacer cualquier tipo de declaración. El objetivo era desactivar el éxito cuanto antes.
Los que se han encargado de pronunciarse han sido el portavoz del PSOE en el Congreso, Diego López Garrido, y el secretario de Organización, José Blanco. Su intención, desplegar una cortina de humo para que se no hablara del éxito de la marcha. Esto explica la polémica que trató de abrir López Garrido con el himno nacional o el ataque directo de Blanco a Mayor Oreja por "ir del brazo del padre de Miguel Ángel Blanco".
"Escuchamos a los ciudadanos"
Tres días después del 3-F, la vicepresidenta primera también ha hablado y lo ha hecho para sumarse a la campaña antiPP. María Teresa Fernández de la Vega ha acusado a los populares de ser una derecha cada vez "más extrema" por su empeño en fomentar el "desorden" y la "exaltación" entre los ciudadanos.
En su intervención en la reunión del grupo socialista en el Congreso, la número dos del Gobierno ha repetido la consigna de los últimos días entre los socialistas: que los dirigentes del PP están llevando a cabo una "estrategia de confrontación sin freno" basada "en el poder por el poder", a pesar de saber que con ella "perdemos todos" y la democracia española.
Tampoco ha faltado la mención al renovado consenso que dice pretender Zapatero. Así, la vicepresidenta ha emplazo al PP a sumarse a un "gran frente democrático frente al terrorismo", al tiempo que aseguraba que el Gobierno seguirá actuando en esta materia guiado por la ley, la unidad y "el recuerdo permanente de las víctimas". El Gobierno, ha dicho, seguirá intentando ese gran consenso porque es lo que reclaman los ciudadanos, "y nosotros escuchamos a los ciudadanos".