LD (EFE) Rodríguez Zapatero ha hecho este anuncio en la inauguración del VII Pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, donde ha subrayado que las pensiones asistenciales tienen garantizada la asistencia sanitaria, quirúrgica y farmacéutica para lo cual el Gobierno destinará en 2007 quince millones de euros, "tres veces más que en 2005". El Pleno de Consejo de la Ciudadanía Española en el Exterior tiene previsto tratar durante tres días de actividades el desarrollo del Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior, aprobado el pasado 30 de noviembre, para el que el presidente del Gobierno pidió la "máxima celeridad y contenido".
El presidente hace una "mención especial" a los "entrañables niños de la guerra", unas 2.000 personas, que recibirán un "notable incremento" en sus pensiones. Tras destacar la extensión sanitaria como acción prioritaria del Gobierno, ha recordado que el Ejecutivo ha suscrito en este ámbito convenios con Argentina, Venezuela y Brasil con miles de nuevos beneficiarios. También recalcó su intención de seguir alimentando y fomentado la identidad española que los descendientes de emigrantes recibieron de sus padres, para lo cual está prevista la puesta en marcha a lo largo de 2007 de un proyecto de diálogo entre jóvenes de España y Argentina.
Zapatero ha inaugurado el Pleno del Consejo General de la Ciudadanía, un órgano consultivo en el que participan representantes del millón y medio de emigrantes españoles residentes fuera de nuestro país, en un acto en el que participaron también el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, y la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí.
Respecto al Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior aprobado el pasado 30 de noviembre por unanimidad en el Congreso de los Diputados, el presidente del Ejecutivo demandó a las fuerzas políticas, al Consejo de la Ciudadanía en el Exterior y a las asociaciones de emigrantes voluntad para el diálogo y la cooperación. En este sentido, señaló que la ley "amplía" y "asegura" prestaciones sociales para los emigrantes en el exterior que hasta ahora estaban dispersas y establece las obligaciones que el Estado y las administraciones públicas tienen con ellos.
A su juicio, lo más importante de la norma, para la que prometió un desarrollo fiel de sus contenidos, es que "no tiene marcha atrás", ya que establece derechos de la ciudadanía que no dependen de la voluntad de quien gobierne. Rodríguez Zapatero subrayó que su presencia en el Pleno supone el "justo reconocimiento" a la labor de los emigrantes que un día dejaron sus hogares en busca de una vida mejor ya que la España moderna y avanzada de la actualidad "no hubiera sido posible" sin su aportación. "Estoy orgulloso de todos ellos porque con su esfuerzo han contribuido a que seamos como somos", ha destacado.
Por su parte, el presidente del Consejo, Francisco Ruiz, ha pedido al Ejecutivo generosidad en las partidas presupuestarias en el desarrollo del Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior.
El presidente hace una "mención especial" a los "entrañables niños de la guerra", unas 2.000 personas, que recibirán un "notable incremento" en sus pensiones. Tras destacar la extensión sanitaria como acción prioritaria del Gobierno, ha recordado que el Ejecutivo ha suscrito en este ámbito convenios con Argentina, Venezuela y Brasil con miles de nuevos beneficiarios. También recalcó su intención de seguir alimentando y fomentado la identidad española que los descendientes de emigrantes recibieron de sus padres, para lo cual está prevista la puesta en marcha a lo largo de 2007 de un proyecto de diálogo entre jóvenes de España y Argentina.
Zapatero ha inaugurado el Pleno del Consejo General de la Ciudadanía, un órgano consultivo en el que participan representantes del millón y medio de emigrantes españoles residentes fuera de nuestro país, en un acto en el que participaron también el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, y la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí.
Respecto al Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior aprobado el pasado 30 de noviembre por unanimidad en el Congreso de los Diputados, el presidente del Ejecutivo demandó a las fuerzas políticas, al Consejo de la Ciudadanía en el Exterior y a las asociaciones de emigrantes voluntad para el diálogo y la cooperación. En este sentido, señaló que la ley "amplía" y "asegura" prestaciones sociales para los emigrantes en el exterior que hasta ahora estaban dispersas y establece las obligaciones que el Estado y las administraciones públicas tienen con ellos.
A su juicio, lo más importante de la norma, para la que prometió un desarrollo fiel de sus contenidos, es que "no tiene marcha atrás", ya que establece derechos de la ciudadanía que no dependen de la voluntad de quien gobierne. Rodríguez Zapatero subrayó que su presencia en el Pleno supone el "justo reconocimiento" a la labor de los emigrantes que un día dejaron sus hogares en busca de una vida mejor ya que la España moderna y avanzada de la actualidad "no hubiera sido posible" sin su aportación. "Estoy orgulloso de todos ellos porque con su esfuerzo han contribuido a que seamos como somos", ha destacado.
Por su parte, el presidente del Consejo, Francisco Ruiz, ha pedido al Ejecutivo generosidad en las partidas presupuestarias en el desarrollo del Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior.