L D (Europa Press) Algunos de los entrevistados en el "Estudio de la violencia en la calle asociada a la actividad de bandas juveniles" apuntan que este "uso de la violencia" no sólo es un medio para lograr sus objetivos (robos, enfrentamiento entre bandas rivales, marcado del territorio, solución de conflictos) sino también un signo de identificación de sus componentes, tanto para los de dentro de la banda como para los de fuera. Añaden que "algunas de estas bandas trafican con drogas en el municipio".
Aparte de estas bandas de carácter más agresivo, el informe apunta a otros "grupos incipientes", tales como los Dominican Don't Play (DDP), los Blancos y Negros del Bronx (toles), los Black and White y los Africorcón, que junto con las ya reconocidas también operan en determinados espacios del municipio, tales como "los Pinos, los Polígonos y la zona de la Estación de Renfe de Alcorcón Central".
El informe, que cuenta con el membrete de la Concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Alcorcón y del Instituto Madrileño del Menor y la Familia de la Comunidad de Madrid, subraya que el personal técnico que trabaja con jóvenes en diferentes áreas (educación, servicios sociales, juventud...) y el tejido asociativo de ámbito territorial, tales como las asociaciones de vecinos y culturales creen que "el fenómeno de las bandas juveniles o no está presente o si existe apenas tiene incidencia". Sin embargo, no son de la misma opinión los jóvenes y adolescentes de Alcorcón, quienes en el informe revelan todos los detalles de comportamiento de estas bandas.
Escaso conocimiento de la realidad
A la luz de esta situación, en la que los profesionales y las asociaciones no eran conscientes de la situación real en Alcorcón, el estudio recomienda la elaboración de un Plan de Acción Integral contra la Violencia Asociada a las Bandas Juveniles con el fin de paliar el insuficiente conocimiento que tienen las instituciones y el tejido asociativo de ámbito territorial de este fenómeno, y la realización de cursos, seminarios y jornadas.
Asimismo, apela a "intensificar el control y la vigilancia en el municipio por parte de las autoridades competentes" en especial a través de "mayor control policial", con el objetivo de evitar "situaciones negativas como son la extorsión que practican las bandas que se adueñan de los espacios públicos, las actitudes y comportamientos violentos e intimidatorios, y los actos vandálicos y delictivos".
También propone actuaciones relacionadas con el aumento de los recursos municipales que contengan programas y servicios destinados a la juventud y aumentar el número de profesionales y programas dedicados en la calle a la dinamización y la educación social.
Bandas y hábitos
Según el informe, en Alcorcón se encuentran Ñetas, localizados en las canchas del Centro joven y ocasionalmente en la plaza de la Hispanidad, una banda compuesta por varones y mujeres, la mayoría de procedencia colombiana y ecuatoriana, aunque también hay una minoría de origen español.
Por su parte, los Latin King frecuentan la calle Mayor, son jóvenes de edades entre los 14 y los 16 años, de ascendencia ecuatoriana, colombiana, y dominicanos, aunque hay una minoría española. Tienen una estructura piramidal, consumen estupefacientes, y llevan a cabo actos vandálicos y delictivos.
Los Skinhead neonazis suelen encontrarse en Ondarreta, aunque muchos de sus miembros no residen en Alcorcón y en la actualidad tienen escasa presencia, en cambio, existen en todo el municipio Sharps, Redskin o antifascistas, especialmente violentos con los anteriores.
Los LMC, siglas que responden a "Los más cabrones", también paran en la plaza de la Hispanidad y son varones de edades comprendidas entre los once y los dieciséis años, principalmente de ascendencia marroquí. Llevan a cabo actos delictivos e intimidatorios, pero mantienen buenas relaciones con los Africorcón.
La banda del chupete son jóvenes de origen gitano y marroquí y se localizan en la Avenida de Villaviciosa, pues residen en los pisos de realojo de dicha calle, y en la estación de Alcorcón Central. El estudio hace referencia otro grupo de jóvenes marroquíes, de edades entre los 8 y los 13 años, que operan en la zona de los Pinos respaldados por otros de más edad.
Finalmente, el informe da cuenta de una banda de bakalas, que se concentra en Los Polígonos, la mayoría de ellos españoles, de ideología "de derechas", con comportamientos violentos hacia los extranjeros y las mujeres.
El alcalde dice que el estudio concluye "que no existen bandas organizadas"
El alcalde de Alcorcón, Enrique Cascallana (PSOE), ha señalado que los profesionales que elaboraron en diciembre de 2005 el informe sobre seguridad encargado por la Concejalía de Juventud y el Instituto Madrileño del Menor y la Familia concluyen que "no existen bandas organizadas" en el municipio.
"El resultado de los profesionales que elaboraron el estudio es que no existen bandas organizadas, sólo la opinión de algunos jóvenes de la existencia de algunos focos de violencia", resaltó el alcalde, quien indicó que se trata de "grupos en torno a los barrios que se autocalifican de bandas y no bandas latinoamericanas contra la comunidad española y viceversa". En este sentido, indicó que la única banda que existía como tal en Alcorcón es la del Chupete, de la que "se eliminó el foco de la violencia".