L D (EFE) Dautry, que no quiso avanzar si los documentos recibidos de Pereiro son suficientes para justificar haber tomado el anabolizante salbutamol que se le detectó durante el Tour del año pasado -en el que quedó segundo tras Floyd Landis-, indicó que "el dossier lo hemos confiado al médico de la Agencia". Ese médico emitirá un dictamen que servirá de base para la discusión de los miembros del colegio de la AFLD.
Si esta instancia considerara que los informes médicos aportados por el ciclista español son insuficientes, lo convocaría para dentro de unas semanas para que se explicara y diera informaciones suplementarias, e incluso podría ser sometido a un examen terapéutico para comprobar que efectivamente sufre asma. Es esta dolencia la que el corredor ha dado para explicar las razones de haber utilizado el medicamento por el que dio positivo. Dautry contó que, en términos generales, la Agencia tiene competencia para sancionar a aquellos deportistas que no justifican de forma suficiente un tratamiento médico con un producto dopante con una suspensión para competir en el futuro en el territorio francés.
En cualquier caso, sus sanciones no tendrían efectos retroactivos sobre el Tour de Francia en caso de un dictamen negativo para el ciclista español, aunque el asunto entonces podría ser tratado por la Federación Francesa de Ciclismo. El secretario general de la AFLD reconoció que junto a Pereiro hay otros tres corredores que dieron positivo en el Tour por productos que aseguran que tomaban para tratar diversas afecciones y para los que también la Agencia considera que no han aportado pruebas médicas suficientes de la pertinencia de dichos tratamientos.
Dautry no quiso revelar los nombres de esos ciclistas, y se limitó a señalar que los tres habían aportado hoy informes médicos suplementarios, después de que estallara la polémica en la prensa sobre el caso del deportista español. Todo comenzó cuando ayer, jueves, el diario Le Monde informó de que Pereiro había dado positivo por salbutamol en dos etapas de la ronda francesa. El corredor había aportado un documento de la Unión Ciclista Internacional (UCI) que autorizaba el uso terapéutico de ese fármaco, pero la AFLD, en virtud de la normativa francesa, reclamaba asimismo los informes médicos que sustentan el empleo del producto, para evitar cualquier duda de que sea una sustancia dopante.
La Agencia asegura que se los había solicitado tres veces por correo, pero sólo ha recibido la documentación una vez que se ha aireado el asunto públicamente en Francia, presentado como un posible nuevo caso de dopaje. Hay que recordar que el 8 de febrero debe comparecer ante ese organismo el ganador del Tour, el estadounidense Floyd Landis, que dio positivo por testosterona en un control y que corre el riesgo de ser desposeído del título.