(Libertad Digital) Las manifestaciones de Madrid y Bilbao han estado envueltas en la polémica desde el principio. UGT trató desde el principio de capitalizar la manifestación de Madrid –según denuncian algunas asociaciones de víctimas las órdenes venían directamente de Moncloa-. UGT y CCOO empezaron convocando una marcha paralela el mismo día que la Federación Nacional de Ecuatorianos Españoles pero a una hora distinta. Finalmente los sindicatos impusieron la suya a los ecuatorianos e inmediatamente se adhirieron el PSOE e IU, que no han secundado ninguna de las manifestaciones de la AVT contra el terrorismo. Después impusieron el lema "Por la paz y contra el terrorismo".
Algunas asociaciones, el PP e incluso el propio secretario general de CCOO, José María Fidalgo, pidieron incluir la palabra "libertad". UGT se negó rotundamente bajo la excusa de que el cartel ya estaba en el taller. Los organizadores esperaron hasta el último momento para acceder a cambiar el lema tras proferir insultos y descalificaciones contra la oposición. Y este viernes los convocantes deciden dar un golpe de efecto e incluir la palabra "libertad" acompañado de una nueva batería de insultos abanderados por los actores del "no a la guerra" a los que no se ha oído durante toda la legislatura de Zapatero. Una maniobra para culpar al PP de la desunión.
En cuanto a la de Bilbao, el lehendakari impuso el inaceptable lema de "Por la paz y el diálogo". Los socialistas decidieron asistir pese a decir que no les gustaba el eslogan. A Batasuna sí le gustaba y anunció que iría a la manifestación. El PSE dijo entonces que ellos no iban si iba Batasuna. Ibarretxe cambió a última hora del jueves el lema y añadió "contra la violencia de ETA". Ello bastó para que el PSE volviera a cambiar de opinión y se sumara de nuevo a la convocatoria pese a que la formación ilegal mantenía en principio su presencia. A última hora de este viernes los proetarras han decidido no ir.
Rajoy: "No tengo claro qué es lo que pretenden"
Rajoy ha expuesto sus razones para mantener su negativa a acudir a la manifestación de Madrid. Durante la inauguración de la nueva sede del PP en San Sebastián, Mariano Rajoy señaló que nadie entendería que los populares, que han ido a todas las manifestaciones de las víctimas, fueran ahora "a una manifestación que no se sabe qué política defiende". “No tengo claro qué es lo que pretenden los que las han convocado: no sé si son partidarios de derrotar a ETA, si son partidarios de la negociación con ETA o de lo que ha hecho Rodríguez Zapatero y que ha fracasado estos días”. El presidente popular ha recordado que estará “siempre en las manifestaciones que defiendan la libertad y que digan “no” a la negociación con ETA”.
A su entender las manifestaciones deberían pedir la derrota de ETA, la no negociación, la vuelta al Pacto contra el terrorismo y la recuperación de la Libertad y ha recordado que uno de los convocantes, UGT, “está pactando en el País Vasco con el sindicato LAB, que es el sindicato de Batasuna”. Para el presidente del PP, “los españoles quieren manifestarse en España con una pancarta que defienda la libertad, vamos a derrrotar a ETA y no vamos a negociar con los terroristas”. “Los españoles quieren la unidad para derrotar a ETA, que es la que yo les propongo a los españoles, y no la unidad para negociar o hablar con los terroristas, que es la unidad que yo no quiero”, ha afirmado.
Tras conocer el cambio de lema, el PP emitió un comunicado en el que exigía tanto la desconvocatoria de la manifestación de Madrid como la de la marcha de Bilbao. La razón, la "confusión" creada en la sociedad tras una semana de "polémicas en torno a los lemas y los manifiestos", que ha llevado a asociaciones y al propio PP a "desvincularse de las mismas". "La ambigüedad y falta de liderazgo del presidente del Gobierno, y la ausencia de una política clara en materia de terrorismo han generado una situación de división y desconcierto en la sociedad".
Peticiones de unión aderezadas de insultos
"Indecencia y deslealtad" han sido algunos de los adjetivos que María Teresa Fernández de la Vega le ha dedicado al PP tras el Consejo de Ministros. AMPLIACIÓN
Pero eso no fue nada comparado con la reaparición estelar de los actores del "No a la guerra". Los acólitos del PSOE se han despachado a gusto con el PP tras largos meses de retiro anestesiados por las jugosas subvenciones que les está concediendo el Gobierno. "Miserable", "gótica", "mediocre", "cerril", "venenosa", han llamado al PP. AMPLIACIÓN
Esta ha sido la forma de pedir a los populares que acudan mañana con ellos a manifestarse con Blanco y Chaves a la cabeza. La denostada Rosa Regás, que amenazó a los trabajadores de la Biblioteca Nacional, leerá el comunicado.