L D (Agencias) El titular de Interior reiteró las circunstancias en las que tres etarras robaron a un excursionista la furgoneta que posteriormente fue cargada de explosivos y empleada en el atentado, subrayando que según las investigaciones de la Guardia Civil, la versión contada por el joven secuestrado es buena y correcta. También explicó que la furgoneta fue introducida en el parking de Barajas el día 29 a las 18:51 horas y que la Policía continúa visionando las grabaciones de las cámaras del aparcamiento.
El ministro dio cuenta de los operaciones de desescombro que se realizan en el aparcamiento. Ya se han retirado unas 2.000 toneladas de restos y unos 120 vehículos han sido identificados. Sin embargo, y aunque los bomberos han llegado al punto central de la explosión, aún no ha sido localizada ni la furgoneta bomba ni los vehículos de los dos ciudadanos de nacionalidad ecuatoriana que siguen desaparecidos. Hasta que no se localice la furgoneta-bomba no se podrá conocer con detalle la cantidad y el tipo de explosivo utilizado por los etarras.
Rubalcaba confirmó que fueron "tres personas" los que secuestraron al propietario de la furgoneta pero "no sabemos cuantas participaron en la colocación de la bomba". Asimismo señaló que "no sabemos donde se montó la bomba" y descartó que exista "conexión fáctica con el robo de pistolas en Francia". Sobre el origen de las llamadas que avisaron de la colocación de la bomba, Rubalcaba dijo que "tenemos ubicadas las llamadas, si no se las he dado es porque no me las ha facilitado la policía y porque probablemente cree que no es conveniente, si podemos se las facilitaré al final de la rueda de prensa". El ministro no quiso pronunciarse sobre si esperaba un comunicado de ETA, dijo que no le gusta "nada" hacer ese "tipo de predicciones" y menos en estas "circunstancias".
Posibilidades "muy, muy, muy remotas" de encontrarles con vida
El director general de la Policía y de la Guardia Civil, Joan Mesquida, visitó el módulo D del aeropuerto -donde continúan ininterrumpidamente las labores de búsqueda y de desescombro- y aseguró que los puntos donde se encuentran los coches de los dos ecuatorianos desaparecidos ya han sido "más o menos" localizados. Mesquida aclaró que "se trabaja muy cerca del lugar donde podía estar uno de ellos, según la información aportada por la familia", aunque insistió en que las posibilidades de encontrarles con vida son "muy, muy, muy remotas", ya que hay un "peso importante" de escombros y en la deflagración se alcanzó una temperatura de más de 1.000 grados.
Explicó que la Policía Científica ha obtenido algunas muestras con las que se podrían determinar la cantidad y el tipo de explosivos utilizados. Mesquida subrayó, además, que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado nunca han estado en tregua y siempre han trabajado con la hipótesis de que ETA pudiera volver a la actividad armada.
En este sentido, afirmó que las instrucciones que han recibido tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil durante los últimos nueve meses han sido las de trabajar con "toda la presión y sin rebajar ni un milímetro la lucha contra ETA", y se remitió a las detenciones de supuestos integrantes de la banda armada practicadas durante este período.
El director de Emergencias y Protección Civil del Ayuntamiento de Madrid, Alfonso del Alamo, corroboró que la situación en el módulo D es "incompatible con la vida humana", y explicó que las labores de desescombro están centradas en la plaza 307 de la segunda planta del aparcamiento, lugar donde estaba estacionada la furgoneta-bomba.
Los 18 bomberos que trabajan en la zona avanzan "muy despacio", continuó, ya que cada vez que se descubre un nuevo vehículo se paran las máquinas hasta que los bomberos, la Policía Científica y los perros adiestrados proceden a su inspección.
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, también visitó la zona y confirmó que los trabajos se desarrollan al "máximo ritmo posible con los dos objetivos de encontrar a los desaparecidos y localizar la furgoneta explosiva sin destruir pruebas".
Explicó que la Policía Científica ha obtenido algunas muestras con las que se podrían determinar la cantidad y el tipo de explosivos utilizados. Mesquida subrayó, además, que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado nunca han estado en tregua y siempre han trabajado con la hipótesis de que ETA pudiera volver a la actividad armada.
En este sentido, afirmó que las instrucciones que han recibido tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil durante los últimos nueve meses han sido las de trabajar con "toda la presión y sin rebajar ni un milímetro la lucha contra ETA", y se remitió a las detenciones de supuestos integrantes de la banda armada practicadas durante este período.
El director de Emergencias y Protección Civil del Ayuntamiento de Madrid, Alfonso del Alamo, corroboró que la situación en el módulo D es "incompatible con la vida humana", y explicó que las labores de desescombro están centradas en la plaza 307 de la segunda planta del aparcamiento, lugar donde estaba estacionada la furgoneta-bomba.
Los 18 bomberos que trabajan en la zona avanzan "muy despacio", continuó, ya que cada vez que se descubre un nuevo vehículo se paran las máquinas hasta que los bomberos, la Policía Científica y los perros adiestrados proceden a su inspección.
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, también visitó la zona y confirmó que los trabajos se desarrollan al "máximo ritmo posible con los dos objetivos de encontrar a los desaparecidos y localizar la furgoneta explosiva sin destruir pruebas".