L D (Europa Press) Fuentes de la defensa señalaron a Europa Press que Escribano y López Cidad están preparando un escrito de personación ante el juzgado Decano de Madrid, que es el que envía los casos a reparto. A este Juzgado han llegado, procedentes de la Audiencia Nacional, las actuaciones en las que el juez Baltasar Garzón imputó falsedad en documento oficial a los dos peritos citados y a un tercero, Pedro Manrique, una investigación de la que el magistrado acordó ayer inhibirse.
Según las mismas fuentes, los peritos Escribano y López Cidad pedirán, además de la acumulación de esta causa a la que ya instruye la juez Gallego contra sus superiores, que sea declarada la nulidad de todo lo actuado hasta el momento por Baltasar Garzón, por contravenir el artículo 238 de la Ley orgánica del Poder Judicial. Dicho artículo señala que los actos procesales serán nulos de pleno derecho cuando, entre otras causas, se produzcan ante un tribunal con falta de jurisdicción o de competencia objetiva o funcional o se realicen bajo violencia o intimidación, según las mismas fuentes.
Por su parte, la titular del Juzgado de Instrucción número 35 de Madrid, Gema Gallego, interrogó este viernes en calidad de testigos a dos de los peritos autores del informe sobre el ácido bórico en el que se incluía un dato sobre el hallazgo de esta misma sustancia en un piso de ETA en 2001. El primero de los peritos en declarar fue Manuel Escribano, quien llegó a las dependencias judiciales de la Plaza de Castilla, en Madrid, a las nueve menos cuarto de la mañana, según fuentes jurídicas. El perito permaneció en el despacho de la juez durante algo más de hora y media y consiguió evitar al casi medio centenar de cámaras de televisión y fotógrafos que montaban guardia a las puertas del Juzgado.
Su compañera, López Cid, llegó a las dependencias judiciales poco antes de las doce y media del mediodía y las abandonó pasadas las dos de la tarde, a la carrera y cubierta con un pañuelo. El lunes está previsto que comparezca ante la juez el perito Pedro Manrique. Ninguno de los dos funcionarios acudió acompañado de letrado -asistencia que no precisaban por acudir en calidad de testigos-, y contestaron a las preguntas de la juez Gallego ante la presencia de una representante del Ministerio Fiscal. El contenido de las declaraciones no ha trascendido, por haberse declarado esta causa secreta.
Fuentes próximas al Juzgado de Instrucción número 35 señalaron que la juez Gallego interrogó a los peritos en el marco de la querella presentada por la Asociación de Ayuda a los Afectados del 11-M, que se dirige varios de sus superiores, entre ellos el ex comisario general de Información Telesforo Rubio. A la magistrada no le consta oficialmente la decisión de Garzón de inhibirse del caso de la presunta falsificación, ni tampoco conoce si sus actuaciones han llegado ya al Decanato de los Juzgados, ubicados en la Plaza de Castilla.
No obstante, las mismas fuentes consideran que el magistrado de la Audiencia Nacional debería haberse inhibido antes de formular las imputaciones contra los peritos. La juez Gallego disponía hoy en su despacho de los interrogatorios a los tres funcionarios realizados por Garzón, que éste le remitió ayer en cumplimiento del principio de "auxilio judicial".