L D (EFE) La lluvia que ha caído hasta poco antes de que finalizara la primera sesión, en la que tan solo han rodado los pilotos de pruebas, ha dejado en los garajes no solo a los dos aspirantes al mundial, sino al resto de los participantes. Incluso podía haber ocurrido que en la segunda sesión tampoco saliera a la pista, porque para este sábado se anuncia ya tiempo seco y no era cuestión de desgastar los motores para no poder probar nada. Pero el tímido sol que ha salido mediada la segunda sesión libre y el hecho de que se hubiese secado el asfalto en la trayectoria de la pista hizo que en los minutos finales todos los pilotos salieran a la pista, cada piloto de cada equipo calzara un tipo distinto de neumático y así avanzar en la puesta a punto para la tanda de clasificación.
El más rápido de la jornada ha sido el italiano Giancarlo Fisichella (Renault), que ha rodado ocho vueltas con un mejor tiempo de 1:34.337 y ha superado en 71 milésimas de segundo al segundo piloto de Ferrari, el brasileño Felipe Massa. Michael Schumacher que ha rodado como su compañero de equipo diez vueltas ha parado el cronómetros en 1:34.565 y tras el se ha situado Fernando Alonso, que solo ha rodado cinco vueltas y se ha quedado a tres décimas del alemán. Quizás estos resultados invitan a pensar que los Renault, con menos vueltas son más rápidos que los Ferrari, pero hasta este sábado, si se estabiliza ya el tiempo, no se podrá tener esta constatación, en un circuito muy exigente para los pilotos y para los neumáticos.
Pedro de la Rosa (McLaren-Mercedes) que aspira a volver al podio de este circuito diez años después de que lo hiciera en la Fórmula Nippon, ha rodado tan solo seis vueltas y logrado el octavo tiempo. Como en China, De la Rosa se ha mostrado más rápido que su compañero de equipo el finlandés Kimi Raikkonen, que ha dado una vuelta menos y ha terminado en décima posición a tres décimas del español. Si siempre es difícil sacar conclusiones los viernes, al no saber las cantidades de gasolina que lleva cada piloto, en jornadas como la de este viernes, y como ocurrió la pasada semana en China, en las que la lluvia cae y luego se va secando la pista es todavía más complicado.