L D (EFE) El arribo masivo de bolivianos a España lo confirmaron fuentes aeroportuarias, que precisaron que este jueves se registró la entrada de más de 900 ciudadanos bolivianos, que llegaron a Madrid en vuelos procedentes de distintos países, aunque el grupo más numeroso (unos 300) viajó en un avión de la compañía Lloyd Boliviana. En los últimos meses se ha incrementado la llegada a España de personas de nacionalidad boliviana debido a que no necesitan visado de entrada, al igual que sucedió en años anteriores con los nacionales de la República Dominicana, Ecuador o Colombia.
Según los datos del SUP, el 55 por ciento de los inmigrantes que llegan a España de forma ilegal lo hacen por el aeropuerto de Barajas, un 20 por ciento acceden por el del Prat, en Barcelona, entre un 10 y un 15 por ciento por fronteras terrestres y tan sólo un 5 por ciento por vía marítima, en los llamados cayucos o pateras, desde Africa.
Las fuentes señalaron que la mayoría de "inmigrantes" bolivianos que llegan a Barajas lo hacen en vuelos directos, como el de la compañía Lloyd, aunque también viajan desde Brasil o Argentina, e incluso aterrizan en Madrid previa escala en algún país europeo firmante del tratado de Schengen -que elimina las fronteras entre países de la Unión Europea-, donde obtienen "el sello de entrada".
Las agencias que se encargan de gestionarles el viaje les facilitan todos los requisitos necesarios para la entrada en España, como el alojamiento y la carta de invitación en numerosos casos e, incluso, organizan grupos turísticos que viajan con guía. Así llegaron el jueves dos grupos de unos 50 ciudadanos bolivianos en el vuelo de Lloyd, según relataron a Efe varios de los afectados, que permanecían en la sala de rechazados y peticionarios de asilo en el aeropuerto madrileño.
"Yo venía en un grupo turístico y cumplía con todos los requisitos", dijo uno de los rechazados, que viajará mañana de regreso a Bolivia, mientras explicaba que tiene la carta de invitación, dinero para su estancia de diez días y alojamiento en hotel. "Yo vengo de vacaciones y no tengo intención de quedarme, al igual que el medio centenar de personas que retuvieron ayer", aseguró, mientras comentaba que "al bajar del avión la Policía paró a más de cien personas y, tras hacernos entrevistas, vino un letrado que no hizo nada, porque casi medio centenar terminamos con la orden de devolución".
El SUP denuncia la falta de funcionarios policiales para "controlar" a los viajeros de estos vuelos y precisa que el Colegio de Abogados no permite que un letrado atienda más de seis casos, con lo que "cuando el grupo es numeroso, como ayer, se tarda mucho tiempo en los trámites".
Según los datos del SUP, el 55 por ciento de los inmigrantes que llegan a España de forma ilegal lo hacen por el aeropuerto de Barajas, un 20 por ciento acceden por el del Prat, en Barcelona, entre un 10 y un 15 por ciento por fronteras terrestres y tan sólo un 5 por ciento por vía marítima, en los llamados cayucos o pateras, desde Africa.
Las fuentes señalaron que la mayoría de "inmigrantes" bolivianos que llegan a Barajas lo hacen en vuelos directos, como el de la compañía Lloyd, aunque también viajan desde Brasil o Argentina, e incluso aterrizan en Madrid previa escala en algún país europeo firmante del tratado de Schengen -que elimina las fronteras entre países de la Unión Europea-, donde obtienen "el sello de entrada".
Las agencias que se encargan de gestionarles el viaje les facilitan todos los requisitos necesarios para la entrada en España, como el alojamiento y la carta de invitación en numerosos casos e, incluso, organizan grupos turísticos que viajan con guía. Así llegaron el jueves dos grupos de unos 50 ciudadanos bolivianos en el vuelo de Lloyd, según relataron a Efe varios de los afectados, que permanecían en la sala de rechazados y peticionarios de asilo en el aeropuerto madrileño.
"Yo venía en un grupo turístico y cumplía con todos los requisitos", dijo uno de los rechazados, que viajará mañana de regreso a Bolivia, mientras explicaba que tiene la carta de invitación, dinero para su estancia de diez días y alojamiento en hotel. "Yo vengo de vacaciones y no tengo intención de quedarme, al igual que el medio centenar de personas que retuvieron ayer", aseguró, mientras comentaba que "al bajar del avión la Policía paró a más de cien personas y, tras hacernos entrevistas, vino un letrado que no hizo nada, porque casi medio centenar terminamos con la orden de devolución".
El SUP denuncia la falta de funcionarios policiales para "controlar" a los viajeros de estos vuelos y precisa que el Colegio de Abogados no permite que un letrado atienda más de seis casos, con lo que "cuando el grupo es numeroso, como ayer, se tarda mucho tiempo en los trámites".