(Libertad Digital) Eduardo Zaplana comenzó realmente por el principio: "no conocemos quiénes montaron las bombas, ni el tipo de explosivo que estalló en los trenes". Son, para el portavoz popular, "lagunas y contradicciones que debilitan el carácter probatorio del sumario".
Recordando que "sigue vigente el mandato de los españoles", Zaplana lo resumió en: "queremos saber la verdad y ver a los culpables en la cárcel". Justificó la presentación de esta interpelación parlamentaria "porque no debemos consentir que se mienta".
"Saben, porque es conocido, que destacados responsables de Interior, –citó al jefe de la UCO o de los Tedax– han omitido falseado o tergiversado la verdad en la comisión de investigación". Zaplana justificó también la razón de su interpelación en que "el Gobierno y en concreto el ministro tiene responsabilidad en la debilidad de la instrucción del sumario" por lo que, dijo, "será a su Gobierno a quien pedirán cuentas lo ciudadanos si los imputados sólo son condenados a penas leves".
Pasando a las pruebas concretas, Eduardo Zaplana anunció que se limitaría a una de ellas, la mochila de Vallecas, y abordaría el resto si era necesario, en el turno de réplica. Respecto a la mochila, el portavoz popular recordó la contradicción de que alguna de las versiones escuchadas ha de ser falsa. La que dice que se encontró en la estación de El Pozo o el informe de la UCI y UCIE que dice que la mochila pudo ser manipulada en IFEMA.
Zaplana recordó al Gobierno que está obligado a proporcionar la verdad porque "somos muchos los que todavía no sabemos". Pidió a Rubalcaba el informe del análisis de los explosivos que estallaron en los trenes, "informes que tienen que existir o explicar por que no existen". El diputado popular insistió en las contradicciones que existen con el sumario y "es a usted, el ministro de Interior al que corresponde esa explicación y a mi exigírselas, además de la inconsistencia de la respuesta a 200 preguntas escritas del PP".
Zaplana también pidió explicaciones de por qué se negó que se destruyeran pruebas cuando la Policía reconoce que se destruyeron las cintas de audio de la intervención policial en el piso de Leganés. "Qué prisa, qué prisa por desguazar los trenes", dijo Zaplana, que preguntó a Rubalcaba si la policía sigue teniendo en su poder la Kangoo o la Skoda, si la policía tiene aún pruebas.
"Después de los días dramáticos cambiaron sus dudas por certezas, ya se sabe todo", dijo Zaplana, que añadió que en estos últimos dos años se ha recorrido el "camino inverso y se han cambiado las certezas por dudas más que razonables, el propio juez ha abierto una pieza para seguir indagando". "Demasiadas contradicciones y casualidades que ofenden al dolor y la memoria de las víctimas".
Según el dirigente popular "el gobierno tiene obligación de salir al paso de las contradicciones del sumario" y garantizar "que paguen los que tienen que pagar por lo que tiene pagar".
RESPUESTA DEL MINISTRO DE INTERIOR
Rubalcaba aprovecha para hacer chistes sobre el precio de la verdad
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, comenzó su respuesta haciendo un resumen de la actuación de Interior cuando lo dirigía Acebes y escudándose en que el PP pide que comparezca el gobierno socialistas "para explicar qué hizo el gobierno anterior, atacado por hechos protagonizados por otro gobierno". Acusó a Zaplana de criticar "lo que ustedes hicieron" y "desacreditar" a las fuerzas de seguridad y a los profesionales "a los que entonces mandaban".
"No lo hacen en servicio a la verdad, ni a su verdad, sino por orden de quien manda en su partido que no se sienta en la calle Génova. Ese es su problema, pero también de todos los españoles".
Habló de Zouhier , "¿recuerdan ustedes a Zouhier? que fue "engañado, perseguido por la guardia civil... ha desaparecido, el auto del juez dijo que no había coacción. Pero antes de desaparecer hizo una entrevista a un diario en castellano. El auto le acusa de un delito de colaboración en los atentados, tenencia explosivo, no sigo por la presunción inocencia".
Rubalcaba no se apeó ni un instante de su estrategia: repasar las exclusivas de El Mundo. Le tocó el turno a Suárez Trashorras: "que cada vez que declara –apuntó– dice algo distinto". También esgrimió "lo que de él dice el auto: colaboración con banda terrorista". Pero Rubalcaba no cambió el eje de su discurso, que era relacionar al PP con el diario de Pedro Jota como autores de una teoría de la conspiración. Y, tirando de un inoportuno sentido del humor reprodujo el titular con el que el diario El País salió este miércoles en ayuda de él mismo. "Hoy veo una nueva interpretación: queremos saber la verdad a cualquier precio". El periódico de Polanco contraprogramaba este miércoles publicando que Trashorras se ofreció a contar lo que fuera por dinero.
Sobre Francisco Javier Lavandera comenzó calificándole como "excelente amigo de Alicia Castro", diputada del PP. Bromeó sobre su testimonio de que es "otro que también teme por su vida". Y no perdió la oportunidad de referirse al libro que se presentó este miércoles escrito por Francisco Javier Lavandera de la mano de Fernando Múgica. Se refirió a él como un libro "editados por el mismo diario que tiene derechos de autor del resto" de confidentes. En cuanto a las amenazas que el propio Lavandera viene denunciando, como el tiroteo sufrido mientras conducía su coche, el ministro también se permitió bromear pese a que las investigaciones policiales están sujetas a secreto: "Ahorro la información sobre el tiroteo", zanjó Rubalcaba.
Más bromas. El ministro del Interior, de discurso brillante, resumió lo que él llama "teoría conspirativa". En su monólogo final dijo: "A ver si lo entiendo, la furgoneta, la mochila, el AVE y Leganés fueron unos y los del 11M fueron otros". A esta síntesis llegó repasando las informaciones periodísticas como "la tarjeta del Grupo Mondragón que confunden con una cinta de música" o la "famosa mochila de Vallecas" que, según el ministro es una prueba irrefutable ya que en el sumario se dice que en ningún momento se rompió la cadena de custodia. La única vez que Rubalcaba se refirió a los explosivos es que la Goma 2 ECO aparece en la mochila, en las vías del AVE, en la furgoneta y en el piso de Leganés. Ni siquiera mencionó si hay un informe sobre los explosivos. Tampoco contestó qué ha sido de los restos de los trenes o de la Kangoo y si se han destruido.