
L D (Agencias) El Ejecutivo ha reconocido que la Gendarmería francesa le informó el pasado 30 de junio de la localización de un vehículo calcinado en el sur de Francia tres días antes. Según el informe de la sección Antiterrorista de la Fiscalía de Paris, de la inspección técnica a la que había sido sometido el coche se podían observar "varias perforaciones sobre los puntos de fijación de las matrículas, un orificio de unos 15 centímetros de diámetro en los dos asientos delanteros, así como un efecto de onda expansiva en el techo del coche, extremos ambos que indicaban la presencia de la deflagración de un artefacto explosivo".
La cadena Ser informó de que la banda hizo explosionar el coche bomba con una bomba lapa y que el sistema de activación del explosivo era diferente al utilizado habitualmente.
El vehículo había sido robado en febrero de 2005 en la misma zona donde fue localizado. Ya con el "alto el fuego" en vigor, los etarras han seguido robando coches en el país vecino. Sólo en 2006 se han detectado más de diez robos en este sentido aunque esta es la primera ocasión que se localiza el vehículo ya explosionado.
Interior descarta lo apuntado por la Ser y lo que manejan fuentes de la lucha antiterrorista y ha negado que los etarras estén aprovechando la tregua para ensayar nuevos atentados. No sería una novedad porque lo mismo ocurrió durante la tregua trampa decretada en 1998. El Gobierno prefiere enmarcar el coche explosionado en la dinámica etarra de destruir los vehículos que utiliza, "bien quemándolos o en algunos casos explosionándolos".