L D (EFE) Zapatero, al ser preguntado por la petición del PSE a ETA-Batasuna para que dé los pasos necesarios para legalizarse y por la respuesta del brazo político de ETA que había asegurado que prioriza la mesa de partidos a la legalización, no quiso valorar las declaraciones de Otegi amparándose en su compromiso de discreción.
Recordó que hace un año, en la comparecencia ante los medios de comunicación, tras la entrevista con el Rey, le preguntaron por una intensificación del terrorismo callejero y recordó que entonces había reiterado que "sólo había un destino para la violencia, que es ver el final de esa violencia".
"Un año después -prosiguió Zapatero-, tenemos un escenario, un horizonte del llamado proceso de paz que ha de cumplir sus etapas y las etapas de ese proceso de paz se están cumpliendo". El presidente recordó también que el día que hizo la "declaración en sede parlamentaria sobre el inicio del diálogo con ETA" se debía ser discreto desde ese momento. Por ello, pidió que se le permita ser "fiel a mis palabras y compromiso y que no haga valoraciones sobre lo que dice Batasuna o algún líder de Batasuna". "Este es un proceso que ha de cumplir distintas etapas y desde mi punto de vista las etapas se están cumpliendo", apostilló.
Rodríguez Zapatero llegó al recinto del palacio en coche procedente de la base aérea de Son Sant Joan, a la que llegó esta tarde desde Madrid, acompañado del delegado del Gobierno en las Islas Baleares, Ramón Socías. A continuación, el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza, acompañó a Zapatero hasta la entrada del Palacio de Marivent, donde fue recibido por Don Juan Carlos. El jefe del Estado, con chaqueta azul marino y pantalón burdeos, y el jefe del Ejecutivo, con traje azul marino, posaron unos minutos para los medios gráficos y después accedieron al interior del palacio, donde despachan en estos momentos.
De la Vega se suma a la estrategia del silencio
Mientras, en una rueda de prensa celebrada en la sede la presidencia colombiana, la conocida como Casa de Nariño, la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega eludió dar detalles sobre el momento en el que se encuentra la negociación con ETA. No obstante recordó que el presidente del Gobierno, anunció a finales de junio el inicio de esas conversaciones y que se daría cuenta de las mismas a finales del mes de septiembre.
Añadió que entretanto "debemos regirnos por la prudencia porque, en este momento, es lo que mejor puede ayudar a que haya una solución que permita avanzar. Esperemos que sea así y tenemos confianza en respetar esa prudencia y ese silencio, que debe acompañar a esta fase de la negociación".
De la Vega eludió también referirse de forma precisa a las declaraciones efectuadas este lunes por el líder de ETA-Batasuna, Arnaldo Otegi, en las cuales decía que su organización pone por delante la constitución de la mesa política a la legalización de Batasuna. Sobre este asunto, De la Vega únicamente dijo que ella no comenta declaraciones de otros dirigentes políticos, máxime si son de una organización ilegalizada. Únicamente indicó que "a la legalidad se vuelve por la vía de la legalidad y no hay otro camino".
A esta estrategia de silencio impulsada por Zapatero se habían unido anteriormente tanto el diario El País como el histórico dirigente del PSE Ramón Jáuregui. El diario del Grupo Prisa aseguraba en un editorial que "un cierto apagón informativo puede ser conveniente para el éxito del proceso" y señala, por otra parte, que existen motivos para pensar que este mes de agosto será el elegido para que se produzcan las conversaciones aunque no cuenta cuáles son las razones que le llevan a afirmarlo.