(Libertad Digital) "Lo importante para el éxito del diálogo", según el periódico, es tener una "conciencia clara del objetivo y los límites del proceso"; unos límites que aparecen difusos ante la opinión pública cuando persiste la voluntad de diálogo sin haberse producido la condición primera y básica que estableció el Gobierno como era la condena por parte de la banda terrorista de la violencia y su cese. Esto todavía no se ha producido. El País entiende que los límites de este "proceso" son empleados por cada uno para caracterizarlos según su conveniencia, sin especificar si el Gobierno entraría también entre estos oportunistas.
Según el editorial, Otegi y los suyos "sólo" pueden aspirar a un "modelo de encaje de País Vasco con mayor aceptación que el Estatuto de Guernica". Mientras justifica y califica de "comprensible" la oportunidad que los proetarras ven esta negociación, le resulta "poco explicable y de delirante" la oposición del Partido Popular. No se pueden obviar las secuelas de cuarenta años de crímenes pero señala que el objetivo esencial es que ETA deje de matar para siempre, ignorando que no son sólo los asesinatos lo único que debiera desaparecer.