Posteriormente, unas mil personas guardaron un minuto de silencio en memoria de las víctimas en una concentración convocada en la Plaza de Bejanque tras el funeral del primer aniversario de este siniestro y sin la asistencia de representantes políticos.
La Junta, "la única responsable"
Susana Rodríguez, viuda del agente forestal Alberto Cemillán, leyó un comunicado de la asociación de familiares de las víctimas del incendio de Guadalajara, que agrupa a nueve de las once familias, en el que consideran "arrogante y prepotente" la actitud de la Junta de Castilla-La Mancha, "la única responsable". Rodríguez criticó a la Junta por no reconocer la "negligencia" y los "errores" que condujeron a la tragedia y destacó el "trato vejatorio y falto de ética" tanto hacia ellos como hacia las propias víctimas.
Tras considerar al presidente de la Junta, José María Barreda, como principal responsable, la viuda del agente recordó que no se les dejó asistir a la comisión de investigación de las Cortes regionales tras el suceso y denunció que se "aprobaron las conclusiones antes de que comenzaran los trabajos".
Además, señaló que Barreda les había ofendido cuando hizo "omisión deliberada" de las víctimas en el mensaje de fin de año y dijo que no puede presidir una comunidad autónoma "por su catadura moral". Aludió también a la "ley del silencio" que se quiere imponer desde la Junta para que no se hable de las víctimas, así como a las ofensas por la "entrega vergonzante" de las medallas de oro concedidas por el gobierno regional a las víctimas.
Mencionó las "presiones a la justicia" y "las instrucciones de pasotismo al ministerio fiscal", aunque creen que la Justicia es el "único reducto" que les queda para que se investigue la verdad y se depuren responsabilidades.