L D (Emilio J. González) David Vegara, además, ha mantenido siempre una buena relación con Zapatero. Asimismo, cuenta con el respaldo de buena parte del PSC-PSOE, incluido el propio presidente de la Generalidad, Pasqual Maragall, que en más de una ocasión ha recordado que Vegara, que anteriormente fue consejero de Sanidad en el Ejecutivo catalán, viene de la Generalitat y entiende los problemas de Cataluña.
En este sentido, conviene recordar tanto el compromiso de Zapatero por mantener la cuota catalana en el Gobierno nacional como el hecho de que Vegara jugó un papel importante a la hora de dar una solución a los problemas de financiación de la sanidad pública en las comunidades autónomas, en especial la catalana. Su participación activa en esta cuestión le supuso serios enfrentamientos con el vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, que se repitieron a lo largo del tiempo por estas y otras cuestiones relacionadas con el Departamento de Solbes.
Solbes, precisamente, es otro de los pesos pesados del Gobierno que trata de influir sobre Zapatero en el nombramiento del nuevo ministro de Industria, pero no jugaría precisamente a favor de Vegara, protegido por Sebastián con quien Solbes ha mantenido un enfrentamiento permanente desde que se inició la legislatura. Solbes, por ello, es de los que se suma al respaldo de la candidatura de su ex compañero en Industria en el último Gobierno de Felipe González, Juan Manuel Eguiagaray, que cuenta con el respaldo de la vieja guardia felipista, aunque sin muchas probabilidades de éxito en tanto en cuanto Zapatero insista en mantener la cuota catalana en el Gobierno sin realizar más ajustes en el mismo que el derivado de la salida de Montilla para encabezar la lista de los socialistas a las elecciones autonómicas catalanas del próximo otoño.
El vicepresidente económico, sin embargo, se encuentra bastante solo en el Gobierno en la defensa de su parcela de poder, en la que considera que Industria es una pieza clave que no puede dedicarse a ser sobre todo un Ministerio catalán. Otros miembros del Gabinete no ven con malos ojos el nombramiento de Vegara, entre ellos la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, esposa de otro hombre de Intermoney, el vicepresidente de la CNMV, Carlos Arenillas. E incluso el propio Montilla, que prefiere la candidatura del actual delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, no vería con malos ojos el nombramiento de Vegara por su talante y su actitud procatalana.