(Libertad Digital) Benedicto XVI ha afirmado que "reconocer y ayudar" al matrimonio "indisoluble" entre un hombre y una mujer es uno de los mayores servicios que se pueden prestar al bien común y al verdadero desarrollo del hombre y de las sociedades. El Pontífice hizo esta manifestación durante la Homilía de la misa con la que se ha clausurado este domingo la V Jornada Mundial de las Familias, celebrada en Valencia y en la que ha reafirmado, en una sociedad cada vez más secularizada, la "vigencia" de la familia, la institución que considera célula básica de la sociedad y de la que ha denunciado está "acechada".
Con la presencia de los Reyes de España y ante varios cientos de miles de personas, en su mayoría familias provenientes de toda España y numerosos países, el Papa ha afirmado que la ayuda y el reconocimiento es la "mejor garantía para asegurar la dignidad, la igualdad y la verdadera libertad de la persona".
Benedicto XVI ha denunciado que en la cultura actual se exalta muy a menudo la libertad del individuo "concebido como sujeto autónomo, como si se hiciera él solo y se bastara a sí mismo, al margen de su relación con los demás y ajeno a su responsabilidad ante ellos". El Santo Padre ha añadido que se intenta organizar la vida social sólo a partir de deseos subjetivos y mudables, "sin referencia alguna a una verdad objetiva previa como son la dignidad de cada ser humano y sus deberes y derechos inalienables a cuyo servicio debe ponerse todo el grupo social". Ante esa situación, el Papa ha subrayado que la Iglesia no cesa de recordar que la verdadera libertad del ser humano proviene del haber sido creado a imagen y semejanza de Dios. "Por ello, la educación cristiana es educación de la libertad y para la libertad".
Aunque este domingo Benedicto XVI no tocado el tema, puesto que no era el objetivo del Encuentro, cuando el pasado 20 de mayo recibió al embajador de España ante la Santa Sede, Francisco Vázquez, en la entrega de cartas credenciales, exigió al Gobierno español que la enseñanza de la religión se imparta en las escuelas "en condiciones equiparables" a las otras asignaturas, criticando de manera implícita el que se haya quitado a la religión la condición de materia evaluable.
De nuevo sobre la familia, el Papa ha insistido en el ejemplo de la familia de Jesucristo y dijo que la basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer, expresa la dimensión filial y comunitaria y es el ámbito donde el hombre "puede nacer con dignidad, crecer y desarrollarse de un modo integral".El Papa ha inisitido en que la familia es una comunidad de generaciones y garante de un patrimonio de tradiciones.