Schweinsteiger inflige un castigo excesivo a Portugal y lleva a Alemania al tercer puesto (3-1)

(Libertad Digital) Ambos equipos salieron al campo con muchos cambios, entre los que destacaba la ausencia de los dos capitanes, Michael Ballack y Luis Figo. Ello, independientemente de problemas físicos, ya revelaba que la llamada "final de consolación" no tiene para ellos la trascendencia de un partido normal en la competición. Portugal tuvo la pelota durante buena parte del primer tiempo, aunque pareció no saber qué hacer con ella. Salvo una aparición de Pauleta en el minuto 14, al llegar solo ante Oliver Kahn y soltar un remate inofensivo que no fue problema para el meta alemán, los portugueses no pudieron traducir su posesión de pelota en situaciones de peligro.

Los alemanes, teniendo claramente menos la pelota, generaron más situaciones de gol en el comienzo. Hubo un buen remate de Sebastian Kehl que salió desviado y, poco después, el propio Kehl remató desde fuera del área y estuvo a punto de sorprender a Ricardo, que estaba adelantado y alcanzó a desviar a saque de esquina. Sin obsesionarse por tener la pelota, los alemanes eran algo más incisivos y procuraban llegar con avances rápidos. Portugal, en cambio, se ahogaba en un toque intrascendente en el centro del campo, a veces mezclado con intentos por lucirse que en una ocasión tuvieron a Cristiano Ronaldo a punto de generar un contragolpe germano con una bicicleta en la que el balón terminó saliendo justo en la dirección contraria a la deseada.

Portugal trató de salir jugando con mayor consecuencia hacia adelante en el segundo tiempo pero, antes de que lograra algo de verdadera relevancia, llegó el primer gol de Alemania con un gran disparo de Schweinsteiger desde fuera del área (m.55). Y sólo cinco minutos después, una falta lanzada por el propio Schweinsteiger la intentó desviar Petit, quien había salido al campo en sustitución de Costinha, para terminar marcando en su propia portería.

En el minuto 78, otra vez Schweinsteiger, en una jugada casi calcada a la del primer gol, volvió a batir a un Ricardo que, a diferencia del primero, en esta ocasión no tuvo culpa alguna. Portugal intentó reaccionar en los últimos minutos, y se estrelló varias veces contra Kahn. Hasta que sobre el final, en el minuto 87, Nuno Gomes logró el gol de la honra tras un gran centro de Figo desde la derecha. Ese gol maquilló el resultado para Portugal. Alemania se va de pie y con el ánimo otra vez en ascenso para pensar en una posterior evolución de un equipo formado en buena parte por jugadores jóvenes, como el propio Schweinsteiger.