L D (EFE) Fue un ejercicio de laboratorio el de Luis Fernando Suárez. El técnico de los ecuatorianos conocía al dedillo cada movimiento de los ingleses, incluso cómo Hargreaves o Carrick, no habituales en el equipo de Eriksson, podían ayudar a crear juego. De la pizarra al campo, en una traslación perfecta. Los ingleses jugaron muy conservadores. Una línea de cuatro, con la novedad de Hargreaves por la derecha, cinco centrocampistas (Carrick), aunque Gerrard jugó como enlace con Rooney, el único delantero.
El planteamiento de Eriksson se convirtió en temeroso cuando a las primeras de cambio, Ecuador pudo marcar. Un error en el despeje de Terry fue aprovechado por Carlos Tenorio, quien disparó, el balón dio en Ashley Cole y en el travesaño. En el minuto 11, la 'tricolor' ya podía ir por delante. Gerrard fue el único que ponía un poco de orden en los ingleses, pero sus intentos se topaban con el orden de los sudamericanos. Un disparo de primeras del centrocampista del Liverpool fue lo mejor de los 'pross' en los primeros veinte minutos. Aunque la posesión del balón era mínimamente a favor de Inglaterra, cuando Ecuador atravesaba la línea divisoria siempre ofrecía buenas sensaciones. Con Terry y Ferdinand muy pendientes de Carlos Tenorio y Agustín Delgado, los sudamericanos tampoco se decidían a dar el paso y jugar más cerca de la meta de Robinson.
En el minuto 20, Edwin Tenorio sacó una falta desde la izquierda y el despeje de Ferdinand le creó un problema a su meta en otra de las contadas llegadas de Ecuador, aunque Inglaterra tampoco ofrecía nada creativo. Algunas faltas lanzadas por Beckham, con más intención que acierto, y un solo remate a puerta en los primeros 45 minutos. Frank Lampard disparó desde la frontal en una jugada que no entrañó nada de peligro para el meta Mora. Un error de Hurtado, aprovechado en primera instancia por Rooney, pero subsanado por Espinoza, es todo lo que Inglaterra mostró hasta el final del primer tiempo, un periodo en el que Ecuador no creyó que podía ganar y los ingleses confirmaron la sospecha de que la 'Tri' no sería un rival fácil.
En un intercambio de fútbol de mediocampo, Inglaterra forzó una falta a unos 30 metros del área. Beckham, esta vez sí, se decidió a lanzar a puerta. Mora esperaba un centro, pero cuando el jugador del Real Madrid afina la puntería, no hay nada que hacer. 'Becks' desde la izquierda realizó un lanzamiento perfecto. El balón superó la barrera ecuatoriana y cayó en una trayectoria perfecta. El balón dio en el poste y a pesar de que el meta ecuatoriano acertó en la dirección, el 1-0 ya estaba en el marcador.
Inglaterra ya tenía lo que quería y Ecuador no se sentía capaz. Un remate de Valencia, bien resuelto por Robinson (m.66), fue la respuesta inmediata de la 'Tri', pero cuando poco después Carlos Tenorio, el mejor hoy de su equipo, tuvo que retirarse lesionado, los ecuatorianos ya sabían que tenían más cerca la derrota. Cuando el partido se abrió, apareció Rooney, que lució más al contar con más espacios, y también Lampard. Los ecuatorianos lo intentaron, pero su fútbol, sin la explosividad de Carlos Tenorio, es más previsible. Inglaterra vuelve, como en el anterior Mundial cuando cayó ante Brasil, a unos cuartos de final y se medirá al ganador del Portugal-Holanda. Ecuador, que por primera vez se ha clasificado para octavos, ha mostrado de lo que es capaz, un equipo con posibilidades a pesar de su inexperiencia en grandes lides.
Ficha técnica del partido
Inglaterra, 1: Robinson; Hargreaves, Ferdinand, Terry, Ashley Cole; Beckham (Lennon, m.87), Carrick, Lampard, Joe Cole (Carragher, m.77), Gerrard (Downing, m.92) y Rooney
Ecuador, 0: Mora; De la Cruz, Hurtado, Espinoza, Reasco; Méndez, Edwin Tenorio (Lara, m.69), Castillo, Valencia; Delgado y Carlos Tenorio (Kaviedes, m.73)
Gol: 1-0, m.60: Beckham, de falta directa
Árbitro: Frank de Bleeckere (Bélgica). Mostró cartulina amarilla a Terry (m.18), Valencia (m.24), Carlos Tenorio (m.37), De la Cruz (m.66), Robinson (m.78) y Carragher (m.82)
Incidencias: 52.000 espectadores llenaron las gradas del Gottlieb-Daimler-Stadion de Stuttgart, en partido de octavos de final del Mundial de Alemania. Mayoría abrumadora de seguidores ingleses en las gradas