(Libertad Digital) El líder del PP, Mariano Rajoy, ha destacado que dentro de los intereses de los ciudadanos no se encontraba el nuevo Estatuto de Cataluña, sino problemas cotidianos como “la inmigración o la delincuencia”. “Si algo ha quedado claro –ante la baja participación– es que no era algo prioritario”, ha dicho Rajoy. Asimismo, el dirigente del PP ha querido destacar el “gran varapalo” que ha sufrido el modelo territorial de presidente del Gobierno, pero “lo más preocupante– ha dicho– es que Zapatero está empecinado en el error”, en referencia a las palabras del jefe del Ejecutivo en las que se felicitó porque “los catalanes han ratificado ampliamente el texto”.
También se ha pronunciado el líder del PPC. Josep Piqué ha destacado el “fracaso” de los que han impulsado el debate estatutario. Los líderes nacionalistas y socialistas –ha recordado Piqué– auguraban una participación mayor "al 50 por ciento", y la realidad es que únicamente ha sido respaldado por un "36 por ciento de los votantes".
El líder de los populares catalanes ha recordado que “se nos presentó este debate para resolver, lo que los nacionalistas llaman, el encaje de Cataluña en el interior de España”, pero “no sólo no se resuelve sino que una parte dice que esto no colma sus aspiraciones”. Ha lamentado, también Piqué, que “se nos dijo que había que organizar este lío porque existía un clamor en la ciudadanía catalana”, pero “lo cierto es que la mayoría de los catalanes no ha ido a votar”. Piqué ha querido dejar claro que la “ley está por encima de cualquier cosa” , por lo que el Estatuto es, a partir de ahora, “el nuevo marco jurídico de los catalanes” si el Tribunal Constitucional no dice lo contrario, o lo “modifica”. Y es que, desde el Partido Popular, no se deslegitiman “los resultados desde el punto de vista jurídico, pero sí político”.
La cuestión latente tras el referéndum, la convocatoria de elecciones en Cataluña y la proclamación de candidatos, también estuvo presente en esta jornada. Así, el portavoz del PSC, Miquel Iceta, dijo que Maragall y la ejecutiva del partido decidirán "pronto" quién encabezará la candidatura socialista a la Generalidad.
Iceta calificó de "entrañable y emblemática" la fecha del 19 de noviembre, porque se habría cumplido el tercer aniversario desde las últimas elecciones catalanas (16 de noviembre del 2003), que encumbraron a Maragall y al PSC a la presidencia de la Generalitat tras 23 años de gobierno de CiU.
El primer secretario del PSC, José Montilla, aseguró que el candidato se conocerá "a lo largo de las próximas semanas" y auguró que "el PSC tendrá un candidato que tendrá el apoyo de todo el partido".
El presidente de CiU, Artur Mas, anunció que en los próximos días "apretará" a Maragall para que aclare cuanto antes la fecha de las próximas elecciones que, a su juicio, deberían celebrarse en octubre. En su opinión, una vez cerrado el proceso de reforma del Estatut, "ya no hay ninguna justificación de país para alargar" esta legislatura, con un "gobierno de Maragall que ha fracasado porque tuvo que quedarse en minoría por sus propios errores, sus peleas y su falta de cohesión".
Iceta calificó de "entrañable y emblemática" la fecha del 19 de noviembre, porque se habría cumplido el tercer aniversario desde las últimas elecciones catalanas (16 de noviembre del 2003), que encumbraron a Maragall y al PSC a la presidencia de la Generalitat tras 23 años de gobierno de CiU.
El primer secretario del PSC, José Montilla, aseguró que el candidato se conocerá "a lo largo de las próximas semanas" y auguró que "el PSC tendrá un candidato que tendrá el apoyo de todo el partido".
El presidente de CiU, Artur Mas, anunció que en los próximos días "apretará" a Maragall para que aclare cuanto antes la fecha de las próximas elecciones que, a su juicio, deberían celebrarse en octubre. En su opinión, una vez cerrado el proceso de reforma del Estatut, "ya no hay ninguna justificación de país para alargar" esta legislatura, con un "gobierno de Maragall que ha fracasado porque tuvo que quedarse en minoría por sus propios errores, sus peleas y su falta de cohesión".