L D (Agencias) El secretario de Estado español de Asuntos Exteriores, Bernardino León, regresó a Dakar para reunirse con el ministro senegalés del Interior, Ousmane Ngom, con quien negoció el desbloqueo del proceso de readmisión de inmigrantes.
Este proceso comenzó el miércoles pasado y fue suspendido 24 horas después tras las protestas senegalesas por las condiciones del primer traslado, que afectó a unas cien personas. En una breve comparecencia informativa junto a Ngom, León precisó que los dos gobiernos "trabajarán en el futuro" sobre "la problemática particular" de los senegaleses objeto de repatriación.
Agricultura, infraestructuras...
León explicó que ambos gobiernos han acordado reforzar la cooperación bilateral en todos los ámbitos, entre los que citó, por un lado, el desarrollo de la agricultura e infraestructuras senegalesas y, por otro, el control aéreo y marítimo frente a la inmigración ilegal.
El ministro senegalés del Interior aceptó también las explicaciones de León sobre la correcta aplicación de la ley a los inmigrantes que permanecen en Canarias y ambos acordaron negociar un sistema de cuotas para regular el flujo legal de inmigrantes. El ministro senegalés destaco la disposición de ambos países a afrontar "estas cuestiones delicadas" con "la mayor serenidad, responsabilidad y solidaridad."
Leon y Ngom insistieron en dejar claro que los dos países definirán un marco legal para los flujos migratorios que garantice la máxima seguridad. El político español subrayó que "no ha habido malos tratos" por parte de los policías españoles que acompañaron al centenar de inmigrantes clandestinos en el primer vuelo de repatriación desde Canarias a Senegal.
Sin embargo, en una nota verbal dirigida a la embajada española en Dakar, las autoridades senegalesas expresaron su protesta por las condiciones en que se produjo la devolución a Senegal de este centenar de inmigrantes.