L D (EFE) Desde que el pasado viernes la Ertzaintza disolviera las concentraciones de Segi ante sedes del PNV y el PSE-EE, se han producido ataques con pintura contra once "batozkis", según el recuento del PNV, y contra el domicilio de un concejal socialista.
La presidenta del PP en el País Vasco, María San Gil, condenó el ataque contra la sede de UGT y se preguntó si estos últimos episodios de terrorismo callejero "pueden entrar también a formar parte de esa verificación que el Ministerio del Interior tiene cerrada del todo" porque "ya no le hace falta tener ninguna prueba más".