L D (EFE) Poco después de conocer las primeras estimaciones que dan la victoria al sí cientos de independentistas se echaron a las calles de Podgorica para celebrar el resultado y se lanzaron fuegos artificiales y disparos al aire.
Más de un 86 por ciento del censo ha depositado su voto en una consulta que ha transcurrido sin incidentes. Con esta participación se supera con creces el umbral mínimo del 50 por ciento exigido por la Unión Europea para reconocer la validez del referéndum. Más de 370.000 de los 484.000 montenegrinos con derecho a voto acudieron hasta las cinco y media de la tarde a las urnas. En las últimas elecciones parlamentarias del año 2002 a esa misma hora el porcentaje de participación fue del 64,1 por ciento y al final se situó en el 77,5 por ciento.
Tanto el Centro de Elecciones Libres y Democracia (Cesid, en sus siglas en serbio) como la comisión electoral central confirmaron que no se han registrado incidentes durante el proceso electoral, al que fueron llamados unos 484.000 ciudadanos montenegrinos con derecho a voto.
Montenegro forma desde 2003 una débil unión estatal con Serbia, que desde su fundación preveía la posibilidad de un referéndum de independencia de cualquiera de las dos partes. La UE exigía que para poder reconocer el nuevo estado, el voto a favor de la independencia debía superar el 55 por ciento del sufragio, con una participación mínima del 50 por ciento.
El primer ministro montenegrino y líder independentista, Milo Djukanovic, se mostró seguro de la victoria y aseguró que ni siquiera piensa en la posibilidad de la que UE no reconozca el resultado por ser inferior al 55 por ciento. "El resultado será muy superior" y "de esta forma nos ahorraremos a nosotros y a la UE largas y aburridas discusiones" sobre el futuro de Montenegro, agregó el hombre que ha dominado la política montenegrina los últimos 15 años. Al depositar su voto al medio día, Djukanovic manifestó que "es un gran día para Montenegro, que va a abrir su perspectiva europea y euroatlántica".
El líder del bloque unionista, contrario a la independencia, Predrag Bulatovic, expresó su confianza en poder evitar la soberanía de Montenegro: "Creo en nuestra victoria". "El resultado final no es importante, todos los actores políticos deben pensar en el futuro europeo de Montenegro", añadió.
Svetozar Marovic, presidente y primer ministro de la unión estatal de Serbia y Montenegro, señaló en la ciudad costera de Budvar al depositar su voto que "el proceso terminará pacífica y democráticamente, según lo deseado por los ciudadanos y de acuerdo con los estándares europeos". Por su parte, Filip Vujanovic, presidente de Montenegro, dijo que "el resultado será aceptado por todos. Después vamos a construir juntos el futuro de nuestro estado".
Unos 3.300 observadores nacionales e internacionales supervisaron la votación.
Montenegro forma desde 2003 una débil unión estatal con Serbia, que desde su fundación preveía la posibilidad de un referéndum de independencia de cualquiera de las dos partes. La UE exigía que para poder reconocer el nuevo estado, el voto a favor de la independencia debía superar el 55 por ciento del sufragio, con una participación mínima del 50 por ciento.
El primer ministro montenegrino y líder independentista, Milo Djukanovic, se mostró seguro de la victoria y aseguró que ni siquiera piensa en la posibilidad de la que UE no reconozca el resultado por ser inferior al 55 por ciento. "El resultado será muy superior" y "de esta forma nos ahorraremos a nosotros y a la UE largas y aburridas discusiones" sobre el futuro de Montenegro, agregó el hombre que ha dominado la política montenegrina los últimos 15 años. Al depositar su voto al medio día, Djukanovic manifestó que "es un gran día para Montenegro, que va a abrir su perspectiva europea y euroatlántica".
El líder del bloque unionista, contrario a la independencia, Predrag Bulatovic, expresó su confianza en poder evitar la soberanía de Montenegro: "Creo en nuestra victoria". "El resultado final no es importante, todos los actores políticos deben pensar en el futuro europeo de Montenegro", añadió.
Svetozar Marovic, presidente y primer ministro de la unión estatal de Serbia y Montenegro, señaló en la ciudad costera de Budvar al depositar su voto que "el proceso terminará pacífica y democráticamente, según lo deseado por los ciudadanos y de acuerdo con los estándares europeos". Por su parte, Filip Vujanovic, presidente de Montenegro, dijo que "el resultado será aceptado por todos. Después vamos a construir juntos el futuro de nuestro estado".
Unos 3.300 observadores nacionales e internacionales supervisaron la votación.