Alcaraz explicó que el sistema de votación que establecen los actuales estatutos permite que "pueda asistir a la asamblea una persona y llevar tres votos delegados". A juicio de Alcaraz, con el conocimiento de este sistema y "la escasa afluencia" a las asambleas, "desde el Alto Comisionado" han "echado cuentas". Así, según explicó el presidente de la AVT, sería suficiente "un autobús de 60 personas" para obtener un total de 240 votos que pudieran desalojarle de la presidencia y acabar también con "la junta que se ha propuesto velar por la dignidad, memoria y la justicia de las víctimas", enfrentarse al "proceso de rendición ante ETA" y "esclarecer la verdad del 11-m".
Francisco José Alcaraz aprovechó su entrevista para solicitar a todos los socios que asistan a la asamblea, incluidos lo que no están de acuerdo con su proyecto. Así, a su juicio, conocerán sus "inversiones en la asistencia" a las víctimas y "lo profundo" de sus objetivos y puede que cambien de opinión. Su presencia "es muy importante" para que la decisión final "sea respaldada por los socios y no por un Gobierno que pretende quitarnos de en medio". "Confío en la Justicia", manifestó Alcaraz, antes de vaticinar que "se demostrará y se verá quién está detrás de esta manipulación, esta maniobra mafiosa".