LD (Europa Press) El presidente de la Junta de Extremadura irrumpe en plena negociación de España y Bolivia sobre los derechos de propiedad de Repsol-YPF. A su juicio, es bueno que haya distintas formas de nacionalismo, una opinión que ha ilustrado este viernes, en un mitin en Badajoz, comparando a Zapatero con Evo Morales.
Cuando Zapatero intenta proteger el sistema energético de España, dijo Rodríguez Ibarra, "nadie dice nada" y cuando lo hace Evo Morales "nos llevamos las manos a la cabeza", ya que la diferencia está en que el "primero es un presidente homologado por las democracias occidentales y el segundo un indígena con jersey". El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, lo acompañaba en un acto político convocado para conmemorar los dos años del Gobierno socialista de Zapatero.
El presidente español fue el primer gobernante europeo en recibir al líder cocalero, el pasado 3 de enero. Morales eligió que Hugo Chávez, Fidel Castro y José Luis Rodríguez Zapatero fueran sus primeros interlocutores internacionales.
El Gobierno español lo recibió con los brazos abiertos durante una visita como presidente electo, desde la que Evo Morales es recordado por su característico jersey a rayas blancas, azules y rojas.
Zapatero lo acogió con la promesa de condonar "una parte muy sustancial" de la deuda boliviana, que suma 120 millones de dólares. Según resumió Fernando Moraleda tras el encuentro del pasado 3 de enero en La Moncloa, el presidente español también ofreció a Evo Morales fondos y transferencia tecnológica para proyectos de modernización agraria y se ofreció para ayudarle a "abrir las puertas para entrar a Europa" y para ser "aliado y mediador" de Bolivia ante organismos y gobiernos.
Nacionalista bueno, nacionalista malo
Cinco meses después, Juan Carlos Rodríguez Ibarra ha arremetido contra el amigo boliviano de Zapatero, a quien no duda en referirse, despectivamente, como "un indígena con jersey", coincidiendo con la visita de Bernardino León, secretario de Estado de Exteriores, a La Paz para intentar desactivar la nacionalización de los derechos de Repsol-YPF, decretada por el Gobierno de Evo Morales.
Ibarra contrapone a Zapatero y Morales para ilustrar dos formas distintas de nacionalismo.
El barón socialista criticó a los aliados nacionalistas del presidente en la política interior española. Cuando "les viene una OPA de fuera", dijo Ibarra, refiriéndose a la oferta de E.On sobre Endesa, "tienen que recurrir al mercado español en busca de ayuda".
Los amigos de Zapatero, nuevos "feudalistas"
Rodríguez Ibarra también dijo que se "había defraudado" al discutir cosas "impropias de la izquierda aceptando estrategias de los nacionalistas", ya que si tuvieran razón "se aceptaría el feudalismo y las desigualdad".
Más allá de estos ataques a las amistades de Zapatero, el presidente extremeño defendió la gestión del presidente, que calificó como "osada" en reformas sociales que "no dejan indiferente a nadie y hacen sentir que merece la pena estar en política y ser militantes de izquierdas".
Para el presidente extremeños la actuación del PSOE demuestra que los socialistas no son "iguales que la derecha" en su "defensa y concepto de libertad e igualdad".
Por otra pate, para Ibarra ahora se abre un periodo de esperanza con "el permiso pedido" para asegurarse la veracidad del alto el fuego de ETA, tras lo cual afirmó: "garantes de que no perderemos la dignidad, que está por encima de la eficacia, están Zapatero y el PSOE".