Junto a Bernardino León, integran esta delegación los directores generales de Financiación Internacional, Ramón Guzmán (Ministerio de Economía), de Comercio e Inversiones, Oscar Vía (Ministerio de Industria) y de Relaciones Económicas Internacionales, María Jesús Figa (Ministerio de Asuntos Exteriores), así como el asesor económico de la Presidencia del Gobierno Jorge Blázquez.
El ministro boliviano de Planificación, Carlos Villegas, había asegurado que tanto Repsol YPF como la brasileña Petrobras han aceptado la nacionalización de los hidrocarburos y están dispuestas a negociar el cambio de las reglas del juego. Según Villegas, el Gobierno boliviano ha recibido cartas en ese sentido de varias petroleras, entre ellas Repsol YPF y Petrobras. Sin embargo, fuentes de Repsol YPF han dicho que "no ha habido ningún contacto, ni oficial ni oficioso, con el Gobierno boliviano", y han reiterado que la empresa sigue esperando a que se concreten las nuevas normas sobre hidrocarburos "para saber a qué atenernos".
Después de hacer estas declaraciones, la petrolera hispano-argentina ha enviado una carta a las autoridades bolivianas en la que les pide que aclaren el decreto aprobado el lunes y les manifiesta su voluntad de seguir en Bolivia y colaborar con su Gobierno sin renunciar a defender sus derechos. La carta se ha enviado al presidente de la compañía estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Jorge Alvarado, con copia para el ministro boliviano de Hidrocarburos, Andrés Soliz, según ha informado la compañía.