LD (Agencias) Tal y como había anunciado durante la campaña electoral, el presidente de Bolivia, Evo Morales, ha firmado, coincidiendo con el Día del Trabajo, un "decreto supremo" que nacionaliza y otorga al Estado el "control absoluto" de todos los hidrocarburos. A partir de ahora, las empresas extranjeras que operan en Bolivia deberán entregar toda su producción a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB, estatal) y regularizar sus actuales contratos.
El "decreto supremo" indica que las empresas que operan en el país, entre las que se encuentran la hispano-argentina Repsol YPF, están obligadas a entregar a YPFB toda su producción y la petrolera estatal comercializará esos recursos en el país y tendrá a su cargo los convenios de exportación. Asimismo, fija un plazo de 180 días para que todas las empresas petroleras suscriban nuevos contratos y se adecúen a la nueva normativa para poder seguir operando, ya que en caso contrario el Gobierno intervendrá sus instalaciones.
El presidente socialista de Bolivia anunció la confiscación de las acciones necesarias de varias empresas mixtas para que YPFB tenga en ellas más del 50 por ciento, entre ellas Andina, filial de la hispano-argentina Repsol YPF, y una subsidiaria de Petrobras Bolivia. Varias fuentes diplomáticas consultadas por EFE comentaron que el "decreto supremo" va más allá de lo que preveían y que a las petroleras extranjeras no les quedará más remedio que recurrir a arbitrajes internacionales, o abandonar Bolivia.
La nacionalización fue anunciada por Morales en el campo de San Alberto, el más rico de Bolivia, operado por la brasileña Petrobras y situado en la localidad de Carapari, a unos 100 kilómetros al sureste de la ciudad de Tarija. Los campos San Alberto y Sabalo, desde donde se exporta el 70 por ciento del gas boliviano y que están operados por Petrobras, están ahora obligados a entregar el 82 por ciento de su producción a YPFB, lo que permitirá generar para el Estado boliviano 300 millones de dólares adicionales en el 2007.
El anuncio se produjo por sorpresa, al mediodía, a una hora en la que, según anuncios oficiales, el presidente iba a encabezar en La Paz una manifestación por el Día del Trabajo. El mandatario dijo que ésta es la "tercera y definitiva" nacionalización del gas, después de que en 1937 se nacionalizara –por primera vez en Sudamérica–, la empresa Standart Oil, y en 1969 la Gulf Oil, ambas norteamericanas.
La nacionalización fue anunciada por Morales en el campo de San Alberto, el más rico de Bolivia, operado por la brasileña Petrobras y situado en la localidad de Carapari, a unos 100 kilómetros al sureste de la ciudad de Tarija. Los campos San Alberto y Sabalo, desde donde se exporta el 70 por ciento del gas boliviano y que están operados por Petrobras, están ahora obligados a entregar el 82 por ciento de su producción a YPFB, lo que permitirá generar para el Estado boliviano 300 millones de dólares adicionales en el 2007.
El anuncio se produjo por sorpresa, al mediodía, a una hora en la que, según anuncios oficiales, el presidente iba a encabezar en La Paz una manifestación por el Día del Trabajo. El mandatario dijo que ésta es la "tercera y definitiva" nacionalización del gas, después de que en 1937 se nacionalizara –por primera vez en Sudamérica–, la empresa Standart Oil, y en 1969 la Gulf Oil, ambas norteamericanas.
Los militares ocupan dos refinerías de Petrobras
El presidente boliviano anunció también que todos los campos petrolíferos serán ocupados por el batallón de ingenieros de las Fuerzas Armadas y funcionarios de YPFB. Poco después, militares y funcionarios de la empresa estatal de petróleos ocupaban dos refinerías de Petrobras y medio centenar de gasolineras privadas. El anuncio fue realizado por el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, durante un discurso ante miles de trabajadores reunidos en La Paz para celebrar el 1 de Mayo.
Además, Morales exhortó a los bolivianos a movilizarse frente a "cualquier intento de sabotaje de algunas empresas" y dijo que serán bienvenidos los trabajadores de las petroleras que se sumen "a este cambio". "Pedimos a las empresas petroleras que respeten la dignidad de los bolivianos, que respeten esta decisión del pueblo boliviano. Si no respetan, nos haremos respetar a la fuerza, porque se trata de respetar los intereses de un país", advirtió Morales.
Bolivia posee reservas de 48,7 billones de pies cúbicos de gas, los segundos en importancia del continente después de los de Venezuela, que tiene el triple. En Bolivia, además de Repsol YPF y Petrobras, operan las empresas Bristish Gas y British Petroleum y la franco-belga TotalFinaElf. También tienen inversiones las estadounidenses Panamerican Energy y Exxon Mobil, la argentina Pluspetrol, la Canadian Energy y la coreana Dong Wong.
Además, Morales exhortó a los bolivianos a movilizarse frente a "cualquier intento de sabotaje de algunas empresas" y dijo que serán bienvenidos los trabajadores de las petroleras que se sumen "a este cambio". "Pedimos a las empresas petroleras que respeten la dignidad de los bolivianos, que respeten esta decisión del pueblo boliviano. Si no respetan, nos haremos respetar a la fuerza, porque se trata de respetar los intereses de un país", advirtió Morales.
Bolivia posee reservas de 48,7 billones de pies cúbicos de gas, los segundos en importancia del continente después de los de Venezuela, que tiene el triple. En Bolivia, además de Repsol YPF y Petrobras, operan las empresas Bristish Gas y British Petroleum y la franco-belga TotalFinaElf. También tienen inversiones las estadounidenses Panamerican Energy y Exxon Mobil, la argentina Pluspetrol, la Canadian Energy y la coreana Dong Wong.