L D (Agencias) La noche electoral de este lunes 10 de abril, pasará a la historia de las elecciones italianas por lo reñido y ajustado del resultado. El futuro gobierno de Italia ha dependido de un puñado de votos. 25.000, para ser exactos. Esa exigua diferencia otorgará automáticamente a la coalición vencedora de Prodi la mayoría absoluta de esa Cámara, al concederle 340 diputados frente a los 277 que consigue la alianza de Berlusconi. Este "premio" a la mayoría es una de las novedades de la reforma de la ley electoral italiana que aprobó el Gobierno de Berlusconi en diciembre pasado. No obstante, desde la coalición de Berlusconi se ha hecho saber ya que se pedirá una revisión de los resultados a la Cámara de Diputados.
La tensión y emoción ha ido in crescendo a medida que, con el avance del escrutinio, la coalición de centro derecha liderada por Berlusconi recortaba distancias. Si con el 50 por ciento escrutado, La Unión, de centro izquierda, tenía casi cuatro puntos de ventaja sobre la Casa de las Libertades, la formación liderada por Berlusconi se situó a menos de media décima cuando se recontaban los últimos votos.
Así han quedado las cosas en lo que se refiere a la Cámara de Diputados, equivalente al Congreso español, y encargada de elegir el nuevo Gobierno italiano. La paticipación en estas elecciones ha sido del 83,6% de los 50 millones de electores, dos puntos más que hace cuatro años, tras una campaña electoral muy tensa.
En el Senado, de mayor peso político que el español, el resultado, aunque también muy ajustado, ha sido más claro. Con ya el 100 por cien escrutado, la coalición de Berlusconi obtiene el 50,2 por ciento de los votos y 153 escaños. A poco más de un punto de distancia la coalición de centro izquierda La Unión, de Romano Prodi, obtiene el 49,0 por ciento. La Casa de las Libertades logró 17.153.256 votos, mientras que La Unión obtuvo 16.725.077. El Senado cuenta con 315 senadores, de los que seis son elegidos por los italianos residentes en el extranjero. También lo integran seis senadores vitalicios. De confirmarse finalmenta la victoria de Prodi en la Cámara de Diiptutados, la mayoría de la oposición en el Senado podría dificultar sobremanera la acción de gobierno del futuro ejecutivo italiano.
De hecho, ha sido muy comentada la posibilidad de que el centro izquierda gane en la Cámara de Diputados y los conservadores en el Senado, donde el reparto de escaños se hace por regiones. Según los analistas este empate haría ingobernable el Parlamento y ya se han levantado voces en una vuelta a las urnas finalmente lo confirman.
Bonaiuti indicó que en la Cámara Baja la diferencia entre las dos coaliciones es "inferior a los 25.000 votos, tan reducida que exige que se haga una escrupulosa comprobación del escrutinio y de las actas electorales". Además, indicó que la coalición de centroderecha "Casa de las Libertades", liderada por Berlusconi, "ha ganado al Senado con más del 50 por ciento y 350.000 votos de diferencia". La polémica estalló entre las dos coaliciones cuando aún el Ministerio del Interior no había dado los datos definitivos para la Cámara de los Diputados.
En la misma línea de Bonaiuti se pronunció Sandro Bondi, coordinador de Forza Italia (el partido de Berlusconi), quien pidió una verificación de los datos para tener "un resultado cierto". En la Cámara de los Diputados "la Unión declara haber logrado un éxito que resulta al momento inferior al uno por mil", dijo Bondi, por lo que consideró "necesario y oportuno" pedir "un control y una verificación de las actas electorales" para tener un resultado que se pueda considerar "realmente cierto y definitivo". Bondi calificó de "acto irresponsable desde el punto de vista político" que la Unión se haya arrogado la victoria en la Cámara de Diputados.
Prodi insistió en que "hoy se ha dado una vuelta de página" y agradeció a todos los que habían contribuido a su "victoria", porque "ha sido una batalla dificilísima". Luego indicó que el centroizquierda tiene "otra obligación", bloquear "el referéndum para la reforma constitucional" y añadió: "Entonces, habremos terminado la obra".Después se mostró convencido de que la coalición que dirige "gobernará unida los próximos cinco años".
Las palabras de Prodi se produjeron apenas minutos después de que otro dirigente de La Unión, el líder de Demócratas de Izquierda, Piero Fassino, proclamase a esa alianza vencedora de las elecciones italianas al haberse hecho con la Cámara de Diputados. Fassino criticó en ese momento la reforma de la ley electoral, porque "ha dividido Italia". "Es evidente lo que hemos dicho estos meses sobre la ley electoral (reformada en diciembre por el Gobierno de Silvio Berlusconi), que a la primera ocasión se ha demostrado como pésima y ha dividido Italia", afirmó.
Los primeros sondeos, realizados por el Instituto Nexus en 1.050 colegios electorales para la cadena pública RAI y la privada (de Berlusconi) Mediaset, y por el Instituto Piepoli para Sky TG24 daban para Prodi entre un 50 y un 54% de los votos en la Cámara de los Diputados y entre un 50-54% en el Senado. El Instituto Nexus también señala que la Casa De las Libertades (CDL), liderada por Silvio Berlusconi obtendría entre un 49 y un 45% de los votos en ambas cámaras, 277 diputados, con lo que perdería 58 escaños. El error de margen de estos sondeos a pie de urna, según Nexus, era, según las empresa, del dos por ciento.
Según Piepoli, "La Unión habría logrado para la Cámara de Diputados el 52 por ciento de los votos, lo que le garantizaría la mayoría absoluta con 340 escaños. La coalición de centro derecha tendría el 47 por ciento de los votos, quedándose con 277 escaños. En el Senado, según el instituto Piepoli, la Unión tendría 167 senadores, frente a los 142 de La Casa de las Libertades, de Berlusconi.
La Cámara de Diputados cuenta con 630 escaños y el Senado con 315. Se eligen por el sistema proporcional y listas cerradas. La diferencia de los resultados de los sondeos con las encuestas anteriores a las elecciones es que éstas daban como vencedor a Prodi en la Cámara de los Diputados, mientras que Berlusconi mandaría en el Senado, y ahora La Unión vencería en ambas cámaras.
Según los sondeos, El Olivo, el principal grupo de la Unión se perfilaba como el más votado, con entre el 30,5 y 33,5 por ciento de los votos, aunque el ex partido comunista DS, el más importante del Olivo, no habría alcanzado el 20 por ciento de los votos. Refundación Comunista, el ortodoxo partido comunista aliado de Prodi habría logrado entre el 5 y el 7 por ciento de los votos y la Rosa en el Puño, que engloba a socialistas y radicales, habría obtenido un importante porcentaje entre el 2,5 y el 4 por ciento.
En la Casa de las Libertades, el partido de Berlusconi, Forza Italia habría superado el "listón psicológico" del 20 por ciento de los votos, logrando entre 20 y 23 por ciento. Alianza Nacional, el segundo partido de la coalición conservadora se habría quedado entre el 10,5 y el 12,5 por ciento de los votos, en la misma línea que en los comicios de hace cinco años. La Liga Norte, el otro gran aliado de Berlusconi, habría logrado entre el tres y el cinco por ciento, otro "parón". El único partido de centro derecha que habría registrado una espectacular subida sería el democristiano UDC, que habría obtenido entre el 5 y el 7 por ciento de los votos.
Los colegios electorales reabrieron sus puertas en la segunda y última jornada de comicios generales para elegir al nuevo Parlamento del que saldrá el nuevo Gobierno. Desde las siete de la mañana de este lunes han abierto los 60.997 colegios electorales que cerraron definitivamente a las tres de la tarde, hora local. Los resultados oficiales se darán a conocer a partir de las 6 de la tarde de este lunes.
Los comicios se han desarrollado en un clima de calma, con algunos incidentes aislados como el lanzamiento, en la madrugada del domingo, de tres cócteles Molotov y la colocación de un artefacto casero, que no explotó, en un colegio de Vittorio Veneto (noreste), donde se encontraron octavillas firmadas por un grupo anarquista.