LD (EFE) En una entrevista concedida a la agencia de noticias EFE, Jesús Pérez-Medel, observador español de la OSCE, ha denunciado que en Bielorrusia "la campaña no ha sido democrática. El presidente Alexandr Lukashenko ha tenido el monopolio absoluto de acceso a los medios de comunicación. Además, ha habido detenciones de partidarios de la oposición".
Las amenazas del KGB bielorruso de "aplastar contra el asfalto" a los que expresen su desencanto y la contundencia con la que aludió al uso de la fuerza "demuestran que el régimen tiene miedo a la libertad, que es una asignatura pendiente en Bielorrusia", indicó. A su vez, la islandesa Urdur Gunnarsdattir declaró que "cuando los miembros de la oposición son detenidos y se les acusa por adelantado de terrorismo, es un mal augurio para los comicios".
Según el observador español del único organismo occidental cuya presencia en los comicios ha permitido el régimen de Lukashenko, del Partido Popular, "Bielorrusia es un país que dice ser libre, pero el Gobierno se comporta de forma despótica. Así es muy difícil que la votación sea transparente".
"Un desarrollo electoral democrático no será posible en estas condiciones", dijo Pérez-Medel, que ha supervisado elecciones en varios países ex soviéticos y quien calificó de "democráticamente nulo" el referéndum bielorruso de 2004 mediante el cual Lukashenko se ha asegurado la posibilidad de renovar su mandato.