(Libertad Digital) La cadena COPE ha informado de que la oposición venezolana enviará una carta al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapataro para exigirle el cese inmediato de Raúl Morodo, embajador español en Caracas.
La cadena dice que los opositores denuncian en el informe que remitirán que, entre otras muchas injerencias en política interna en las que ha incurrido Morodo, les está presionando para que levanten su veto para que el Movimiento V República (partido del presidente Hugo Chávez) pueda ingresar en la Internacional Socialista.
Según dijo Henry Ramos, dirigente de Acción Democrática, en una entrevista concedida a la COPE en Caracas, durante una reunión auspiciada por la Fundación "Pablo Iglesias" pidió que facilitara la entrada de Chávez en la Internacional Socialista. Además, afirmó que Morodo se ofreció para servir de enlace entre los social demócratas venezolanos y Chávez.
Ramos dijo a la COPE que "se planteó eso descaradamente. Primero que me entendiera con Chávez, y para eso él (Morodo) pudiera servir de intermediario para conseguir una entrevista. Eso lo rechace porque no solamente no tenemos ninguna comunicación con Chávez, ni queremos tenerla, porque yo no necesito que nadie me pida audiencia. En lo que se refiere a la internacional socialista nos pidió que levantáramos el veto por parte de nosotros, que somos el único partido venezolano en la Internacional".
Las posturas del diplomático español, afirmó Ramos, es considerada como una "injerencia inadmisible" en la política interna de su país. Ese tipo de opiniones lanzadas en público, dijo, son continúas y reprochables en un embajador. "Son intromisiones reiteradas y opiniones que un embajador no puede emitir porque se trata de opiniones sobre política interna. Califica a los partidos de la oposición, califica las actuaciones políticas del Gobierno mucho más allá de la mera representación de los intereses españoles en Venezuela", señaló.
Desde el PSOE, la responsable de asuntos exteriores Trinidad Jiménez, subrayó que el partido Acción Democrática no tiene "ningún derecho" a pedir la destitución del embajador Morodo porque el diplomático no es responsable de lo que se le acusa. Recordó que para ingresar a la Internacional Socialista, la formación interesada tiene que cursar una petición formal directamente al secretariado del organismo que tiene su sede en Londres. El derecho de aceptar o no a partidos, a decidir si el partido de Chávez es socialdemócrata, dijo, corresponde exclusivamente a las organizaciones miembros. Además, aseguró que "él (Morodo) no ha cursado ninguna petición formal".
Aval democrático para una dictadura
Por su parte, Gustavo de Arístegui, portavoz de Exteriores del PP, declaró que considera inadmisible que Morodo haga esas gestiones para lograr un aval democrático para un partido que gobierna bajo la dictadura. No entiende, dice, por qué el embajador que representa a todo el Estado español realice gestiones partidistas.
Arístegui dijo que es lamentable que el embajador español "haga de actor político-partidista y de intermediario para lograr la incorporación de un partido que es evidentemente antidemocrático y que ingrese a la Internacional Socialista, a la que no sólo pertenece Acción Democrática, sino el Movimiento al Socialismo que es un partido socialdemócrata, que también está en la oposición y que ambos están siendo brutalmente reprimidos y perseguidos en Venezuela".
Las gestiones de Morodo, dijo, son como si el PP propusiera el ingreso en la Internacional Demócrata Cristiana del partido del dictador serbio, ya fallecido, Slobodan Milosevic. Dijo que espera que los socialistas, que conocen la realidad de la dictadura venezolana se opongan.