(Libertad Digital) El origen de la polémica fue este comentario de Zaplana: "Cuánto ganaría la Cámara si usted, que es tan aficionada a disfrazarse de vez en cuando, un día, aunque sólo fuera un día, se vistiera de vicepresidenta del Gobierno y cumpliera con su obligación de responder a las preguntas de la oposición".
El portavoz fue interrumpido por los gritos de las diputadas izquierdistas, y cuando retomó la palabra, tras la consabida regañina del presidente de la Cámara, Zaplana explicó a Marín que no creía "haber cometido ningún exceso", y que no dijo, por ejemplo, como suele a hacer De la Vega, que "le falten escrúpulos". El portavoz dijo que pidió a De la Vega, "simplemente", que, "por favor, se vista un día de vicepresidenta del Gobierno y conteste a las preguntas que le hacemos en la sesión de control".
En ese momento las diputadas del PSOE y de otros partidos de izquierda, escoltadas por el ministro de Industria, José Montilla, abandonan el hemiciclo, visiblemente ofendidas, o al menos eso se deducía de su descompuesta expresión.
Mientras el grupo de "fugadas" esperaban apelotonadas en uno de los laterales, junto a la entrada del hemiciclo, De la Vega respondía: "Me siento absolutamente honrada de haber representado a este país en un encuentro en África con mujeres africanas, y compartir la esperanza con esas gestores de la resistencia frente al hambre, el desastre y la pobreza, y prefiero esa imagen de vicepresidenta que la imagen de las Azores, y creo que la mayoría de los ciudadanos están conmigo". Tras esto, regresaban las diputadas en medio de un gran aplauso.
Cuando De la Vega recurría a los insultos a Zaplana, como viene siendo habitual en las sesiones de control, diciendo que "no sé si es un problema de ignorancia, que sería excusable, maledicencia, que sería intolerable, o machismo, que sería detestable, me temo que son las tres cosas juntas", las "ofendidas", que ya había regresado a sus escaños, ovacionaron los insultos de la vicepresidenta al portavoz del PP. No faltaron tampoco las referencias al apoyo del PP a "una guerra injusta e inmoral": "Me quedo con la política exterior de priorizar África y sus mujeres (antes) que (con) la de apoyar una guerra inmoral e injusta".
A todo esto, Zaplana intentó preguntar sobre la tramitación del estatuto. En concreto el portavoz dijo que quería saber "si le parece razonable, si en su opinión el estatuto tendrá un plazo de vigencia como dice el presidente, o si tiene fecha de caducidad como dice Artur Mas". Porque recordó que "Mas ha dicho que puede ser una sola vez o a través de varias etapas" y "por tanto en este proceso que ha promovido Zapatero estamos en una etapa grave pero no la última".
De la Vega, más preocupada del asunto del disfraz y del show de las diputadas, dedicó poco a tiempo a esta cuestión. Dijo que "va a haber un buen estatuto, que responde al consenso dentro del margen de la mayoría", e insistió en que "habrá estatuto y buen estatuto".