L D (Agencias) El Obispo de Jerez de la Frontera (Cádiz), Juan del Río, manifestó que la libertad de expresión "tiene los límites que marca la Ley", aclarando que "el nombre de Dios no debe ser utilizado en vano para aplastar, con la violencia, los principios que configuran las sociedades libres", informa Europa Press.
No obstante, sobre los "ultrajes" al cristianismo criticó que en los últimos meses se han estrenado "con sustanciosas subvenciones públicas" obras de teatro "blasfemas", se ha mostrado en televisión "cómo se cocina un Cristo" y en Arco "se expone un Corazón de Jesús con un misil". Además, aportó un ejemplo de Jerez, la "inoportuna y desafortunada" letra sobre la Eucaristía de una chirigota el pasado día 22.
A todo lo anterior, sumó la "curiosa permisividad" ante programas televisivos que "pintan" a la comunidad católica como "un agregado de personas casposas, reprimidas, cavernícolas y otras muchas lindezas", con lo que concluyó que "da la impresión de que todo vale contra el Cristianismo, incluso la tibieza en la aplicación del Código Penal". Por último, el Obispo reiteró que el derecho de libertad de expresión "no puede implicar el derecho de ofender los sentimientos religiosos de los creyentes".
Más querellas
La Unión Demócrata Ceutí (UDCE), un partido de corte musulmán, ha anunciado que va a hacer extensiva la querella contra una chirigota por "incitar a la discriminación", al incluir en sus letras "insultos" a la comunidad islámica, al presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas (PP), y a otros miembros de la Asamblea porque "existe una clara connivencia, omisión y cooperación en los delitos tipificados en la querella, ya que conocían la letra con carácter previo y no hicieron nada".
La polémica se ha producido en Ceuta con motivo de la actuación de la chirigota "Los polluelos con pelo en los güevo", que resultó ganadora del primer premio en el concurso de carnaval, informa Efe.
No hay censura previa
En este sentido, Vivas había rechazado antes las letras de la chirigota acusada de "racista" porque "hieren sentimientos colectivos". El presidente de Ceuta aseguró que el carnaval "es un tiempo que se presta al desenfreno, a la crítica y a la broma generalizada, pero no debe servir para hacer ciertas manifestaciones que desde el Gobierno ceutí no podemos compartir".El presidente ceutí señaló que "tenemos que rechazar de manera rotunda y categórica todo aquello que signifique herir sentimientos de colectivos, se trata de cuestiones que lamentamos y no compartimos y que, además, rechazamos". No obstante, puntualizó que los responsables "exclusivos de lo que se canta son los autores de las letras, ya que no hay posibilidad de ejercer una censura previa".