(Libertad Digital) El líder del PP respondió a los asuntos centrales de la actualidad. No cabe duda de que su intervención parlamentaria sobre la OPA estuvo más a la altura de su discurso habitual. En Antena 3 reflejó hasta tres veces, a modo de queja, la falta de información por parte de Zapatero a su partido. Cuando se le preguntó si el Estatuto es un adelanto del precio a pagar a ETA abordó el pacto de Perpiñán pero concluyó que no se puede comparar lo que ocurre en ambas comunidades porque en Cataluña "no se asesina a la gente".
TERRORISMO. ¿Por qué el Gobierno no se fía del PP? "Pues no tiene motivo porque yo he sido ministro del Interior y siempre compartí objetivos e información, el problema es que este Gobierno excluye lo que represento en España", en referencia a los votantes del PP. Recordó, de hecho, el Pacto del Tinell que especifica la exclusión al PP como condición de acuerdo entre tres partidos que gobiernan Cataluña.
Gloria Lomana preguntó entonces si Rajoy se fía del presidente y de que no pagará un precio a los terroristas. El líder popular recordó que el 14 de enero de 2005 en pleno debate del Plan Ibarretxe hablé con él en La Moncloa para proponerle un pacto de Estado en aquellos asuntos de importancia real como la igualdad de los ciudadanos. "Me dijo que sí, y por eso a los medios les dije que estaba satisfecho y hasta elogié al presidente del Gobierno. Sin embargo, explicó, "pasaron los días y donde dijo que sí, dijo que no", influido por sus socios. "Me pasa lo que le pasa a muchos españoles", que han visto como cae la confianza en el presidente Zapatero, "del 66 por ciento al 37 por ciento". En definitiva, Mariano Rajoy dijo, "Si Zapatero me llama para acordar el interés general allí estaré".
Sobre la nueva ley de apoyo a las víctimas anunciada este miércoles en el Congreso y si contara con el PP para ello, Rajoy dijo: "Yo creo que sí, pero si sirve para mejorar la situación de las víctimas", algo de lo que dudó porque, en su opinión, "lo que cuenta es la actitud y la política antiterrorista". Todo ello, añadió, "necesita un cambio".
"Los socialistas dicen mucho, me llaman vil, cobarde, traidor. Yo no utilizo nunca esos calificativos. Yo no acepto la bajeza moral de que el PP no quiera el fin de ETA". Lógicamente el argumento de Rajoy fue recordar que el PP ha perdido a muchos concejales a manos de ETA. "Por pudor –dijo– no recordaré a las personas del PP que fueron objeto del terrorismo". Eso sí, manifestó su intención de retomar la política antiterrorista del Partido Popular si llega al Gobierno: "Quiero acabar con ETA sin precio, sin los presos en la calle".
Gloria Lomana preguntó entonces qué haría el PP "al día siguiente" de un eventual anuncio de tregua de ETA y si el PP lo apoyaría. "No creo que haya que negociar nada, no hay contrapartida posible porque entonces haremos del terrorismo un instrumento para hacer política; sería una bofetada a las víctimas", respondió. "La batalla es acabar con el terrorismo. Esa era la filosofía del Pacto Antiterrorista".
La siguiente pregunta fue, jugando con la frase de Zapatero si "estamos en el principio del fin o ante una nueva tregua trampa". Rajoy volvió a argumentar con la falta de información sobre el llamado "proceso de paz", datos que sí parece tener, por ejemplo, Gaspar Llamazares. "Es que no sé dónde estamos –lamentó–, el Gobierno debe hablar poco, actuar mucho, recuperar el consenso, decir que no habrá negociación y honrar a las víctimas". Insistió en cómo estaba la banda terrorista cuando el PP dejó el Gobierno: "A ETA se la dejó fuera de las instituciones, colocamos a ETA en el peor momento, sobre todo con la Ley de partidos, pero hoy han vuelto al Parlamento Vasco.
La siguiente pregunta –insistía Lomana– es si acabaría "con el proceso" en caso de ganar las próximas elecciones. Y la respuesta volvió a ser la misma: "Es que desconozco el proceso, sólo me anuncio en octubre de 2004 el inicio del principio del fin" para luego, se quejó, "hacer guiños a Batasuna". En este punto recordó los últimos episodios al respecto: "Batasuna celebra un congreso y sólo lo evita un juez; se cesa a Fungairiño, baluarte de la lucha antiterrorista. No se cuál es el inicio del principio del fin. Lo aprendí siendo ministro del Interior".
EL ESTATUTO CATALÁN. La primera pregunta sobre este bloque se refería a si el Estatuto se puede interpretar como "un anticipo del pago a ETA". El líder del PP hizo al respecto varias consideraciones: "Eso no lo sé, es evidente que hay cosas como la tregua de ETA decretada en Cataluña", derivada del pacto de Perpiñán o el último análisis de ETA sobre "lo que pasa en Cataluña", que avalarían esa idea. Sin embargo, pese a que "en Cataluña hay partidos que defienden planteamientos similares a los del País Vasco" –citó como ejemplo a ERC– "no se asesina a la gente, las situaciones son distintas".
Preguntado por qué es lo peor del Estatuto, Rajoy dijo que el concepto de nación. Retomó la raíz de la proposición no de ley del PP para pedir un referéndum en base a que los ciudadanos deben ser libres e iguales y que no hay más nación que España desde 1812. Pero también recordó que "el Estatuto de 1932 hablaba de región" y no de nación. Además, el Estatuto catalán impulsado por Zapatero "establece derechos y deberes distintos para los ciudadanos de Cataluña y los del resto de España", algo que tampoco hacía el de 1932. En definitiva, Rajoy hizo hincapié en que, aunque el presidente del Gobierno sostiene ya que la nación no significa nada –"término discutido y discutible"–, "no hay país del mundo donde dentro de la misma nación haya mas naciones. Es algo peligroso. La nación –concluyó– es un conjunto de personas iguales y libres".
La razón por la que el PP presentó recurso ante el Tribunal Constitucional es, como recordó el líder popular, primero para que se planteara como reforma constitucional y no estatutaria. "Ahora pido –añadió– que el Constitucional se pronuncie antes del referéndum, para que los ciudadanos actúen con conocimiento de causa. Sería irresponsable si no fuera al TC", concluyó.
LA OPA HOSTIL CONTRA ENDESA. Ya se había referido con gran acierto a este asunto en la sesión de control al Gobierno. Lomana le preguntó si prefiere una empresa alemana o catalana. Lo primero que destacó Rajoy es que "una OPA es una operación entre empresas", ante la que el Gobierno "no tiene nada que decir que no sea defender la competencia y los intereses de los consumidores". Por lo demás, "deben decidir los accionistas". La operación política está pues clara. El Gobierno aprobó una OPA hostil; cuando surge la oferta de la alemana, cambia las reglas del juego". Como Gloria Lomana insistió en si prefiere que la empresa sea española, catalana o alemana, Rajoy optó por la ironía: "Prefiero que todas las empresas del mundo sean españolas pero eso es imposible y absurdo. Es ir contra el signo de los tiempos".
En suma, según Rajoy, "es fácil matar al mensajero, pero difícil dar argumentos". Para el presidente del PP, "defender Cataluña es mi obligación" y en la OPA defender "a los consumidores".
CONVENCIÓN NACIONAL DEL PP. Preguntado por los "roces" de su partido afirmó que el único partido que ha dicho lo mismo en Cataluña y en Madrid es el PP. "Nos opusimos allí y aquí, mientras Zapatero y Mas pactaron una cosa en septiembre y después otra y ERC dijo primero votaría sí y después que votaría no". Para Rajoy, esto afecta a "la fiabilidad de las personas y la confianza de la gente".
CONVENCIÓN NACIONAL DEL PP. Preguntado por los "roces" de su partido afirmó que el único partido que ha dicho lo mismo en Cataluña y en Madrid es el PP. "Nos opusimos allí y aquí, mientras Zapatero y Mas pactaron una cosa en septiembre y después otra y ERC dijo primero votaría sí y después que votaría no". Para Rajoy, esto afecta a "la fiabilidad de las personas y la confianza de la gente".
En cuanto a pactar con otras formaciones como el BNG o Ciudadanos de Cataluña, el líder popular dijo que los "acuerdos se hacen en base a programas". Se definió como "partidario de los acuerdos" porque "no tenemos enemigos, los únicos enemigos son los terroristas, tenemos adversarios", aunque admitió que Ciudadanos de Cataluña le "suena mejor" que el BNG. No obstante, aseguró que no puede renunciar "a mis convicciones y principios para pactar".
Rajoy aclaró que en la convención que celebrará el PP este fin de semana, va a plantear un "nuevo proyecto político", un programa para las próximas elecciones y no se trata de cambiar "caras" porque eso se hace en los congresos. "Vamos a estudiar los temas que importan a la gente" como inmigración, sanidad o impuestos y adelantó que propondrá bajar los impuestos de sociedades de un 35 por ciento a un 25 por ciento y en el IRPF bajar el tipo máximo del 45 al 40 y el tipo mínimo, del 15 al 12.
Rajoy aclaró que en la convención que celebrará el PP este fin de semana, va a plantear un "nuevo proyecto político", un programa para las próximas elecciones y no se trata de cambiar "caras" porque eso se hace en los congresos. "Vamos a estudiar los temas que importan a la gente" como inmigración, sanidad o impuestos y adelantó que propondrá bajar los impuestos de sociedades de un 35 por ciento a un 25 por ciento y en el IRPF bajar el tipo máximo del 45 al 40 y el tipo mínimo, del 15 al 12.
CRÍTICA Y AUTOCRÍTICA. En el ecuador de la legislatura, la principal crítica que el presidente del PP hace al Gobierno es "haber confundido las prioridades, no saber cuál es el objetivo, que no es revisar la historia, ni la Guerra Civil ni los líos con la Iglesia, ni reformar las instituciones. El objetivo era preocuparse de las personas y sus problemas. Ese es el mas grave error y su mayor irresponsabilidad". En cuanto a sus propios errores o los de su partido "habría que preguntárselo al señor Blanco", dijo. "Intento cumplir con mi responsabilidad en temas duros e incómodos. Tengo la obligación de dar la batalla y defender posiciones justas, en terrorismo y en España. Los errores nos los dicen todos los días todos".
Rajoy no da importancia a su baja valoración en las encuestas. "Yo antes estaba superior en valoración que Zapatero. Cuando se es presidente se tiene un plus y el papel en la oposición es poco vistoso, pero el PP sube en las preferencias de los españoles ".
El dirigente popular calificó de "generosidad sin límites consigo mismo" el nivel de optimismo de Zapatero, que lo situó cuando fue entrevistado por Gloria Lomana en un 8,5 y dijo que a él le da "pudor" calificarse. " No me voy a calificar a mi mismo y a Zapatero no le puedo aprobar por confundir los objetivos , romper el pacto sobre terrorismo y armar un lío con España que no beneficia a nadie y era innecesario", concluyó.