L D (Europa Press) El secretario de Organización y Coordinación del PSOE, José Blanco, aseguró este lunes, durante la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal, que los socialistas no son "comentaristas políticos" de los comunicados de ETA. "El único comunicado que de verdad nos interesa es aquel en el que la banda anuncie el cese de la actividad terrorista", manifestó. Respecto a si no hay una diferencia en esta postura con la tesis de Zapatero, que en una entrevista publicada este fin de semana en ABC llamó a no pensar en los "protocolos del pasado", Blanco dijo que su espera de un "comunicado que diga que ETA abandona definitivamente las armas no es nada original".
"Es la posición que el PSOE viene expresando desde hace mucho tiempo y que concuerda íntegramente con la expresión de Zapatero en la entrevista", argumentó Blanco, que insistió en que ése será "el comunicado" que su partido valorará. No obstante, aseguró que de ello no se puede "colegir" que estén esperando uno. "No esperamos nada, porque no nos movemos en el terreno de las especulaciones", aseveró. En cuanto a si el PSOE mantiene las expectativas de paz, declaró que su formación no especulará sobre este tema.
"Creemos que hay condiciones para transitar por el camino hacia la paz", proclamó, subrayando que este jueves se cumplirán mil días sin atentados con víctimas mortales. A ello sumó la eficacia policial y la firmeza judicial, con más de 200 detenidos y el deseo "de paz como nunca" en la sociedad española y vasca". Este conjunto son, según Blanco, "datos objetivos y ciertos". "A partir de ahí, mantenemos la expectativa y no damos pábulo a especulaciones", señaló.
"Interpretación equívoca" de la postura del PSE
Por otra parte, aseguró que la "decisión" del PSE de abstenerse en una enmienda de Aralar en la que se abogaba por una paz sin vencedores ni vencidos "ha llevado a una interpretación equívoca". "Por eso se ha rectificado", resaltó Blanco, que agregó que "quien tiene que ganar es el estado de Derecho, la libertad y la justicia". El dirigente socialista recordó que la dirección del PSE ya se ha posicionado --López ha lamentado que la postura de su partido desfigurase sus posiciones-- e hizo hincapié en que la "prioridad" es que "triunfe el estado de Derecho, la justicia y la paz" y que en ello están comprometidos todos los socialistas. "Ese es el deseo y por ello trabaja todos los días el Gobierno de España", enfatizó.
Sobre si este tema había sido objeto de debate en la Ejecutiva, dado que la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, se mostró contraria a que el debate se plantee en términos de vencedores y vencidos, Blanco aseguró que "todos los socialistas" dicen "lo mismo". "Deseamos el final de la violencia aplicando el estado de Derecho --insistió--. Que se haga justicia, se garantice la libertad y esos son los términos en los que siempre el PSOE se ha expresado". En su intervención, Blanco subrayó que el Gobierno no permitirá que "nadie frustre las esperanzas de paz puestas en el País Vasco". A su entender, es el PP y no el PSOE el que está "sólo" en su "oposición radical a las reformas y a las expectativas de paz".
Ataque a Rajoy
Por ello, trasladó la tesis de que es el presidente del PP, Mariano Rajoy, quien debe cambiar para "no hacer política desde la demagogia y la mentira", ser "leal en la lucha antiterrerrorista", no "usar políticamente a las víctimas y no frustrar las expectativas de paz". "O Rajoy cambia o lo cambiarán los ciudadanos cuando voten en las urnas", pronosticó. Así, juzgó "deseable" que entre "soflama y soflama", el presidente 'popular' reconozca que el dato de mil días sin víctimas mortales es positivo. Y reclamó a Rajoy que "ayude" a que estos mil días "se prolonguen" hasta hacerse definitivos; que admita que el Ejecutivo tiene "tanta legitimidad" como tuvieron gobiernos anteriores para conseguir el fin de la violencia; y que no sea el único líder de la oposición de la historia de la democracia española que se ha "negado a colaborar" con el Gobierno en la búsqueda de la paz.
"Le pedimos que ayude y apoye a las víctimas sin caer en la tentación de manipular, le pedimos que si se abre una esperanza cierta de proceso de paz, él y su partido estén al lado de quienes la impulsan y no de quienes tratan de frenarla", reclamó, exigiéndole que abandone "la hipocresía". En este punto, Blanco quiso poner dos ejemplos, que ilustró repartiendo entre los periodistas noticias de prensa. Así, indicó que en noviembre de 1997, a través de quien era secretario de Estado de Seguridad, Ricardo Martín Fluxá, que fue "un negociador con ETA", el entonces Ejecutivo del PP dijo que en la lucha contra la banda terrorista no habría "vencedores ni vencidos" y que sólo con la vía policial jamás se conseguiría la pacificación.