L D (Agencias) El presidente del PP, Mariano Rajoy, pidió este domingo al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, una "rectificación inmediata" de su política antiterrorista y territorial en lo que definió como una "decisión patriótica" y una "exigencia moral" de la mayoría de los españoles. En una declaración en la sede del PP, en la que no admitió preguntas, Rajoy aseguró que el último comunicado de ETA "en nada cambia lo dicho por la banda en los últimos 30 años", y lamentó que no concuerde "con lo que se nos ha estado anunciando de manera frívola por el Gobierno", ya que "ETA no está en un proceso de paz, sigue en sus objetivos políticos, que es fundamentalmente el derecho de autodeterminación".
En relación al Estatuto catalán, Rajoy demandó a Zapatero una "reflexión y una rectificación inmediata" después de que ERC, "los socios del PSOE, convocaran ayer una manifestación en contra de lo que ahora está defendiendo el propio Partido Socialista". En referencia a la declaración, este sábado por la noche, de ETA, Rajoy dijo que el único comunicado que puede interesar a los españoles es aquel en el que ETA diga que abandona las armas y se disuelve, por lo exigió al presidente del Gobierno "deje de seguir impasible la hoja de ruta de la negociación que ETA propuso en Anoeta".
El presidente del PP exigió a Zapatero que diga a los terroristas "que no se negocia ni se paga precio político" y deje claro que la Ley se aplicará con "transparencia y firmeza". En este sentido, para Rajoy, la política de combate a ETA se debe basar en los principios de "hablar poco, pactar con la oposición, aplicar la ley, honrar a las víctimas y no pagar un precio político a los terroristas", fundamentos, de los que en su opinión, el Gobierno se ha apartado en esta legislatura. Además, el presidente "popular" acusó al PSOE de haber roto la unidad antiterrorista, "con una oposición que quería colaborar con lealtad con el Gobierno" y enumeró como decisiones "erróneas" y "dañinas" el cese del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, "el trato a las víctimas" o "haber permitido que Batasuna esté en el Parlamento vasco", en un actitud "mendicante" ante una organización terrorista.
Mariano Rajoy insistió en que un gobierno democrático "no puede estar dispuesto a lo que sea y como sea" o a pagar a ETA un precio político por la paz. En cuánto al Estatuto catalán, Rajoy recordó que él "no era partidario de abrir este proceso" y subrayó que "en mala hora se le ocurrió a algunos plantear reformas de todo, de la Constitución, de los estatutos y de las reglas de juego, esa no era el interés nacional". "Si quieren seguir con esto –añadió– que hagan caso de lo que ha dicho el Consejo de Estado en su dictamen, que respeten la ley y los procedimientos y que promuevan una reforma de la Constitución cuyo primer punto sea fijar las competencias que el Estado en ningún caso puede denegar". Mariano Rajoy calificó el Estatuto de "lesivo" para los intereses generales de los españoles y particularmente de los catalanes y consideró que "se está imponiendo un modelo de sociedad que nadie quiere, se está atentando contra libertades individuales, se está aprobando una norma con un intervencionismo atroz y se está mirando hacia atrás en lugar de mirar hacia adelante". A juicio de Rajoy, en estos momentos se corre el riesgo de hacer un Estado "no viable, que no puede cumplir sus funciones básicas: la garantía de la igualdad, la cohesión social y la solidaridad".
En relación al Estatuto catalán, Rajoy demandó a Zapatero una "reflexión y una rectificación inmediata" después de que ERC, "los socios del PSOE, convocaran ayer una manifestación en contra de lo que ahora está defendiendo el propio Partido Socialista". En referencia a la declaración, este sábado por la noche, de ETA, Rajoy dijo que el único comunicado que puede interesar a los españoles es aquel en el que ETA diga que abandona las armas y se disuelve, por lo exigió al presidente del Gobierno "deje de seguir impasible la hoja de ruta de la negociación que ETA propuso en Anoeta".
El presidente del PP exigió a Zapatero que diga a los terroristas "que no se negocia ni se paga precio político" y deje claro que la Ley se aplicará con "transparencia y firmeza". En este sentido, para Rajoy, la política de combate a ETA se debe basar en los principios de "hablar poco, pactar con la oposición, aplicar la ley, honrar a las víctimas y no pagar un precio político a los terroristas", fundamentos, de los que en su opinión, el Gobierno se ha apartado en esta legislatura. Además, el presidente "popular" acusó al PSOE de haber roto la unidad antiterrorista, "con una oposición que quería colaborar con lealtad con el Gobierno" y enumeró como decisiones "erróneas" y "dañinas" el cese del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, "el trato a las víctimas" o "haber permitido que Batasuna esté en el Parlamento vasco", en un actitud "mendicante" ante una organización terrorista.
Mariano Rajoy insistió en que un gobierno democrático "no puede estar dispuesto a lo que sea y como sea" o a pagar a ETA un precio político por la paz. En cuánto al Estatuto catalán, Rajoy recordó que él "no era partidario de abrir este proceso" y subrayó que "en mala hora se le ocurrió a algunos plantear reformas de todo, de la Constitución, de los estatutos y de las reglas de juego, esa no era el interés nacional". "Si quieren seguir con esto –añadió– que hagan caso de lo que ha dicho el Consejo de Estado en su dictamen, que respeten la ley y los procedimientos y que promuevan una reforma de la Constitución cuyo primer punto sea fijar las competencias que el Estado en ningún caso puede denegar".