L D (EFE) Mayor Oreja, que ofreció una rueda de prensa en Melilla para tratar sobre los fondos europeos en el periodo 2006-2013, consideró que el Gobierno "ha jugado un papel lamentable" en este caso, pues "no se puede" apelar al derecho de reunión "cuando tras treinta años de democracia en España un grupo terrorista como Batasuna solicita un congreso".
"Eso es un brutal sarcasmo, un desprecio terrible a las víctimas y al sufrimiento que muchos españoles han padecido del terrorismo, y no se puede despachar ese congreso como el simple ejercicio del derecho a la libre reunión o asociación", reprochó.
Según el también ex ministro del Interior, Batasuna "tiene un Plan B y el Gobierno lo sabe, esa ha sido la constante de ETA, lo importante no es que un juez haya sido un elemento decisivo para pulverizar el Plan A, sino que la pregunta es qué va a suceder con el Plan B". Vaticinó que dicho plan será "un fraude de ley como una catedral", y opinó que habrá que medir al Gobierno en función de la forma en que actúe ante dicha posible alternativa de Batasuna.
En previsión de lo que pueda ocurrir, Mayor oreja advirtió de que "el lunes no se puede decir que había que aplicar con un criterio de proporcionalidad la utilización de las Fuerzas de Seguridad del Estado y que eso ya ha impedido la celebración de un acto",.
Tampoco será valido, añadió, esgrimir que "es algo que compete al Gobierno vasco", toda vez que "esto compete al Gobierno de España, que debe exigir al vasco la coordinación en la operatividad de la Ertzaina y, si no, de la Guardia Civil y de la Policía, para que ese Plan B, que es una realidad, no se produzca".
"Eso es un brutal sarcasmo, un desprecio terrible a las víctimas y al sufrimiento que muchos españoles han padecido del terrorismo, y no se puede despachar ese congreso como el simple ejercicio del derecho a la libre reunión o asociación", reprochó.
Según el también ex ministro del Interior, Batasuna "tiene un Plan B y el Gobierno lo sabe, esa ha sido la constante de ETA, lo importante no es que un juez haya sido un elemento decisivo para pulverizar el Plan A, sino que la pregunta es qué va a suceder con el Plan B". Vaticinó que dicho plan será "un fraude de ley como una catedral", y opinó que habrá que medir al Gobierno en función de la forma en que actúe ante dicha posible alternativa de Batasuna.
En previsión de lo que pueda ocurrir, Mayor oreja advirtió de que "el lunes no se puede decir que había que aplicar con un criterio de proporcionalidad la utilización de las Fuerzas de Seguridad del Estado y que eso ya ha impedido la celebración de un acto",.
Tampoco será valido, añadió, esgrimir que "es algo que compete al Gobierno vasco", toda vez que "esto compete al Gobierno de España, que debe exigir al vasco la coordinación en la operatividad de la Ertzaina y, si no, de la Guardia Civil y de la Policía, para que ese Plan B, que es una realidad, no se produzca".
El consejero vasco de Justicia, Joseba Azkarraga, dio también su opinión sobre el plan B de Batasuna. Según Azkarraga, el acto de este sábado se debe permitir porque está organizado por "un grupo de personas que no pertenecen orgánicamente a una organización que está disuelta". Tras explicar que esta nueva convocatoria no es en el interior de Bilbao Exhibition Centre, sino en el exterior, y recordar que el auto prohíbe la celebración del Congreso de Batasuna y no éste, dijo que si hay un grupo de ciudadanos que quieren realizar una convocatoria de este tipo, "entiendo que se debe de permitir ese acto".