L D (Europa Press) El portavoz de ERC en la Cámara Baja, tachó de "lamentables, patéticas, vergonzosas y ofensivas tanto para los catalanes como para los andaluces y para todos los demócratas españoles". "Es una payasada, con perdón para los payasos", sentenció. A su juicio, una comparación de este tipo sólo podría ser "perdonable" si la hiciera una persona "condenada al analfabetismo", pero que persona "culta" y con un cargo institucional "tan importante" como Hernando "se permita la libertad de insultarse a sí mismo y a los demás" es injustificable.
En este sentido, Puigcercós acusó a Hernando de "sumarse al linchamiento barato del todo vale contra los catalanes, tengan la ideología que tengan" y subrayó que sólo los "ultras y los 'hooligans' supeditan el respeto y la cultura al fanatismo". Por todo ello, advirtió de que si Hernando no pide "perdón" demostrará que es un "fascistón".
Para el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, "el presidente del CGPJ corre de manera irrefrenable hacia la irrelevancia, como diría el anterior presidente del Gobierno". "Son tantas sus declaraciones absurdas, extemporáneas, sin sustancia, que cada vez resultan menos relevantes y no hay más que ver la repercusión que han tenido hoy en los medios de comunicación".
En declaraciones a Com Ràdio recogidas por Europa Press, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, criticó las palabras de Hernando, por quien dijo sentir "lástima". "Que yo sepa, no se necesita bailar sardanas para hacer sentencias en catalán y poder atender a ciudadanos que quieran expresarse en esta lengua en una vista oral –aseveró–. Confundir una cosa y la otra es sinónimo de una falta de cultura importante".
Por su parte, el senador del PNV y representante de esta formación en la Mesa de la Cámara Alta, Iñaki Anasagasti, aseguró que las palabras del presidente del CGPJ sobre la lengua catalana evidencian que un personaje de "extrema derecha". Para corroborar su afirmación, Anasagasti recordó que en la pasada legislatura, cuando fue elegido presidente del CGPJ, mantuvo una conversación con él en la que subrayó lo "sensible" que fue Franco con la justicia administrativa. Este tipo de comentarios, dijo, ilustran que es "un personaje no de derechas, sino de extrema derecha".