(Libertad Digital) El ministro español de Defensa, José Bono, ha expresado su respaldo al jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general Félix Sanz Roldán, expresando su preocupación por que el ejercicio de su derecho de expresión y la defensa "en voz alta" del texto constitucional pueda llegar a ser interpretado como un ataque.
Bono expresó su convencimiento de la total integración y adaptación del colectivo militar a la era constitucional y afirmó que sería sorprendente para él "que alguien crea que cuando un militar defiende la unidad de España leyendo en voz alta el artículo segundo de la Constitución está haciéndole daño a alguien". Para el titular de la Cartera de Defensa, la preocupación debería existir en el caso de que "hubiera algún militar que fuera en contra de la unidad de España (...), que hubiera militares que quisieran modificar la Constitución por cauces distintos a los que en ella se prevén", pero que sean "amantes de la Constitución", aseguró Bono, le produce "una enorme satisfacción".
"En el Ejército español el ruido de sables, no hace falta que pongan el oído para escucharlo, porque hace mucho tiempo que no hay ningún ruido antidemocrático en los cuarteles, eso sí, los militares no son mudos, ni podemos tampoco taparles la boca ejercitando un derecho o cumpliendo con lo que puede ser una prerrogativa reconocida en las leyes", subrayó el ministro. Para Bono, lo sorprendente es que haya podido generar alarma "que alguien diga que España es una patria indivisible", algo en lo que el ministro aseguró no encontrar falta. "Repetir, aunque a alguien no le guste escuchar, que España es patria común e indivisible de todos los españoles, (...) aunque a alguien le moleste, no puede ser susceptible de sanción alguna", reiteró Bono.