L D (Agencias) El jefe del Gobierno se mostró convencido de que se conseguirán conjugar con el interés general las aspiraciones de Cataluña, considerada "nación" en el nuevo Estatuto y que se atribuye comptencias exclusivas del Estado. Zapatero se remitió al Parlamento nacional, que es donde se abre ahora la "fase decisiva" sobre el Estatuto y dijo que es "una gran oportunidad y no un gran riesgo".
Tras la aprobación en Cataluña del Estatuto, el PP había demandado varias opciones: que se tramite como lo que es, una reforma constitucional, lo que requiere una mayoría de dos tercios. Si se hace como reforma estatutaria, que se le otorguen las mismas posibilidades de éxito que al Plan Ibarretxe: nulas. De no ser así, Ángel Acebes consideró que deberían convocarse elecciones generales para que los españoles puedan pronunciarse sobre el "proceso de separación territorial". Para De la Vega nada de ello es necesario porque estamos ante "un proceso de normalidad democrática" que se puede pulir con "retoques".
Hasta ahora, este había sido el único pronunciamiento oficial del Gobierno. Zapatero, que este sábado tenía un acto público en León prefirió guardar inicialmente silencio. Ya había hablado Maragall a última hora de este viernes en TVE. (Ampliación)
Zapatero augura que no habrá "tormenta" en el PSOE
Zapatero rechazó que vaya a haber una "tormenta" en el PSOE por este proceso y dijo que sólo ven riesgo en él los que tienen poca confianza en la democracia. Además, señaló que una vez superada una primera fase en el Parlamento de Cataluña, comienza una segunda "esencial, decisiva y definitiva" en las Cortes. Sin embargo, las diferencias entre los socialistas han vuelto a evidenciarse. Marcelino Iglesias, presidente de Aragón, ve "varios asuntos inconstitucionales" en el texto catalán. (Ampliación)
Respecto a la posibilidad de que la inclusión del término "nación" en el Estatuto sea compatible con la Constitución, Zapatero recordó que su articulado expresa su voluntad de ser acorde al texto constitucional, y dijo que hay que hacer posible el reconocimiento de la "fuerte identidad de Cataluña" con la Constitución sabiendo que se está en el terreno de "los conceptos más políticos que jurídicos" "Es posible, vamos a trabajar por ello y estoy convencido de que tanto las fuerzas políticas de Cataluña como las del Congreso lo van a conseguir", reiteró.
Sobre su palabras de hace dos años, cuando se comprometió a asumir el texto que aprobase el Parlamento catalán, subrayó que nadie podría imaginar que cualquier reflexión suya avalara una reforma que sobrepasara el texto constitucional.
Preguntado por la posibilidad de que las posiciones discrepantes de algunos destacados dirigentes socialistas puedan provocar una "tormenta" en el seno del PSOE, aseguró que eso no va a ocurrir pese a que pueda interesarle a "algunas fuerzas políticas". "Más que una tormenta, podemos tener un tiempo de mucha calma fructífera para Cataluña y para España", aseguró.