L D (EFE) El presidente del PPdeG, Manuel Fraga, ha instado este lunes a su partido a "buscar fórmulas de acuerdo" de cara al congreso extraordinario en el que se elegirá a su sucesor con el objetivo de "hacer unas candidaturas importantes y no seis o siete pequeñas". En todo caso, advirtió de que, independientemente de lo que se haga en este cónclave, deberán estar "todos a una" con el nuevo líder del PP gallego.
En el acto de inicio de curso político del PPdeG en Ribadumia (Pontevedra), Fraga se comprometió a que quien gane tendrá "todo el apoyo" por su parte y que colaborará "con el que pida ayuda", pero nunca "con nadie por encima de los demás". Acompañado del presidente del PP, Mariano Rajoy, el ex presidente de la Xunta de Galicia recordó que no es la primera vez que se despide, puesto que ya lo hizo cuando dio paso a Antonio Hernández Mancha y a José María Aznar, pero ironizó al señalar que ahora "lo malo es que es la verdad: nunca volveré a ser candidato".
El líder de los populares gallegos dejó en manos del congreso, que los populares gallegos celebrarán entre el 10 de diciembre y finales de enero, la elección de su sucesor. "No soy ni de boinas ni de birretes", comentó Fraga, para no apoyar ninguna de las previsibles candidaturas, "aunque me comprometo a apoyarlas todas" y a respaldar la que salga del congreso.
El ex presidente de la Junta de Galicia comenzó su intervención asegurando que este lunes era un día "muy significativo" para él, después del esfuerzo de los últimos meses para mantener unido al partido y facilitar la renovación en Galicia. "No somos un partido de clases, hay sitio para todos", dijo Fraga, para añadir que los ocho años del PP serán recordados por su final, en referencia a la masacre del 11 de marzo, pero sobre todo por la herencia "de la que muchos se están aprovechando ahora", añadió.
El líder de los populares gallegos dejó en manos del congreso, que los populares gallegos celebrarán entre el 10 de diciembre y finales de enero, la elección de su sucesor. "No soy ni de boinas ni de birretes", comentó Fraga, para no apoyar ninguna de las previsibles candidaturas, "aunque me comprometo a apoyarlas todas" y a respaldar la que salga del congreso.
El ex presidente de la Junta de Galicia comenzó su intervención asegurando que este lunes era un día "muy significativo" para él, después del esfuerzo de los últimos meses para mantener unido al partido y facilitar la renovación en Galicia. "No somos un partido de clases, hay sitio para todos", dijo Fraga, para añadir que los ocho años del PP serán recordados por su final, en referencia a la masacre del 11 de marzo, pero sobre todo por la herencia "de la que muchos se están aprovechando ahora", añadió.
La sucesión se resolverá en un congreso "abierto y democrático"
En cuanto a los años de su gobierno en Galicia, Manuel Fraga dijo que "se puede decir que hay un antes y un después" de su llegada y que el PP ha contribuido a hacer "una Galicia para todos". El fundador del PP se ofreció a continuar trabajando en el Parlamento gallego y a contribuir a llevar adelante el congreso abierto, del que saldrá su sucesor.
"Teneis en mi un compañero al servicio de Galicia y de España como siempre", apuntó Fraga, al tiempo que emplazó a los militantes que se dieron cita en el Pazo de Quinteiro de Ribadumia a que permanezcan unidos. "El que gane (el congreso) tendrá mis votos", concluyó el ex presidente gallego, tras hacer un repaso por su trayectoria política de los últimos años.
Fraga y Rajoy se entrevistaron dos veces este verano, una en Santiago de Compostela y otra en Perbes (A Coruña), para ultimar los preparativos del relevo de la cúpula del PP gallego y, en concreto, la sucesión del veterano dirigente, tras casi dieciséis años al frente del partido en Galicia. En su última reunión, de la que Rajoy salió muy satisfecho, según transmitió a través de su gabinete de prensa, ambos líderes acordaron que la sucesión se resuelva en un congreso "abierto y democrático", al que concurrirán varias candidaturas.
En cuanto a los años de su gobierno en Galicia, Manuel Fraga dijo que "se puede decir que hay un antes y un después" de su llegada y que el PP ha contribuido a hacer "una Galicia para todos". El fundador del PP se ofreció a continuar trabajando en el Parlamento gallego y a contribuir a llevar adelante el congreso abierto, del que saldrá su sucesor.
"Teneis en mi un compañero al servicio de Galicia y de España como siempre", apuntó Fraga, al tiempo que emplazó a los militantes que se dieron cita en el Pazo de Quinteiro de Ribadumia a que permanezcan unidos. "El que gane (el congreso) tendrá mis votos", concluyó el ex presidente gallego, tras hacer un repaso por su trayectoria política de los últimos años.
Fraga y Rajoy se entrevistaron dos veces este verano, una en Santiago de Compostela y otra en Perbes (A Coruña), para ultimar los preparativos del relevo de la cúpula del PP gallego y, en concreto, la sucesión del veterano dirigente, tras casi dieciséis años al frente del partido en Galicia. En su última reunión, de la que Rajoy salió muy satisfecho, según transmitió a través de su gabinete de prensa, ambos líderes acordaron que la sucesión se resuelva en un congreso "abierto y democrático", al que concurrirán varias candidaturas.
Las dos que cuentan actualmente con más posibilidades son la José Manuel Barreiro, presidente del PP en Lugo, al que se ve mejor colocado, y la del ex vicepresidente primero de la Xunta Alberto Núñez Feijóo, ambos portavoces adjuntos del partido en Galicia. Sin embargo, no se descarta que también aspiren a suceder a Fraga, Xosé Cuiña, quien figuraba como delfín del veterano político hasta la crisis del "Prestige", aunque se le ve dentro del partido con pocas opciones, y el ex conselleiro de Pesca Enrique López Veiga, quien recientemente insinuó esta posibilidad.
Rajoy admite que la sucesión en el PP gallego "no es fácil"
El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró este lunes que aunque la sucesión de Manuel Fraga al frente del PP de Galicia "no es fácil", si el partido recurre a "la inteligencia y la generosidad" podrá "resolver bien" el proceso. En el inicio del curso de político del PP en Ribadumia (Pontevedra), Rajoy aseguró ante cientos de militantes que el relevo de una persona con el respaldo y la personalidad de Fraga "obliga a estar a la altura de las circunstancias". "Me brindo a ayudar en lo que sea para lo esté", añadió el dirigente popular, quien sostuvo que en el partido "cabemos todos".
Rajoy aseguró que los populares deben aprovechar el congreso extraordinario en el que se resolverá la sucesión para "ofrecer una alternativa en la que los gallegos puedan creer y confiar" y, por ello, destacó la "gran responsabilidad" de esta cita, para la que todavía no hay fecha concreta más allá del plazo entre diciembre y enero. Además, ratificó que el partido "no puede ni quiere" prescindir de la "autoridad moral, el consejo y el criterio" de Manuel Fraga y aprovechó también para fecilitar al PPdeG por los resultados de las autonómicas, en las que resultó vencedor pese a que no pudo revalidar la mayoría absoluta.
Por ello, recordó al Ejecutivo bipartito que "su responsabilidad es gobernar" y le advirtió de que "ya no vale criticar al PP" o denunciar que no hay recursos económicos, porque las partidas de las arcas autonómicas "son las que había toda la vida". En este sentido, confió en el que nuevo presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, reclame al Ejecutivo central las necesidades de la comunidad, como la consecución del Plan Galicia o las especificidades en materia de financiación sanitaria. "No me gustaría que pasara en Galicia lo de Cataluña", añadió.
Rajoy denunció que el tripartito "lleva dos años sin gobernar, peleados y sin criterios" y recomendó al Gobierno gallego "que no confundan los objetivos con el método". Así, indicó que "si quieren una reforma estatutaria, que la presenten a la oposición una vez se hayan puesto de acuerdo con sus socios". El presidente del PP explicó que "no vale reunir comisiones o hablar, porque no han hecho nada" y recordó que a nivel estatal, el Gobierno ha planteado la reforma de la Constitución "sin saber qué quiere hacer". "¿Qué quieren, que se la haga el Consejo de Estado?", se preguntó, al tiempo que mantuvo que si tienen una propuesta "están obligados a decirla, porque si no, son unos irresponsables".