En su comparecencia ante la comisión de Interior del Congreso, José Antonio Alonso detalló las actuaciones adoptadas por su Departamento tras conocer la muerte de Juan Martínez Galdeano, el pasado 24 de julio. Insistió en que su Ministerio tendrá "tolerancia cero" frente a cualquier irregularidad que vulnere los derechos de los ciudadanos.
Sobre la omisión de pruebas, el ministro explicó que el teniente imputado por estos hechos ocultó el uso de dos armas antirreglamentarias para reducir al agricultor. Además, desveló que las informaciones recogidas por los agentes de la Comandancia de Almería, a partir de los datos suministrados por el puesto de Roquetas, apuntaban a que las cintas del circuito de televisión no recogieron ningún hecho relevante de lo sucedido pues, según se les indicó en el cuartel, los momentos en que fue reducido el detenido "quedaban en una zona oculta para la grabación". Un día después se comprobó que no era verdad.
Alonso reveló también que el teniente imputado reconoció que de haber visto el día anterior las imágenes en las que reducen al fallecido "no lo estaríamos viendo hoy", en referencia al momento del visionado ante el teniente coronel y el comandante de Almería. Sobre los antecedentes del teniente, el ministro se limitó a apuntar que las dos denuncias judiciales fueron interpuestas en julio de 2004 y febrero de 2005 y que posteriormente archivadas. No llegaron a conocimiento de sus mandos superiores, por lo que no se pudo investigar ni tomar medidas de tipo disciplinario, explicó.
"Dimisión al cuadrado" del PP y levedad de críticas de los nacionalistas
En el turno de intervenciones de los portavoces, el PP recomendó al ministro "irse a casa" por la mala gestión de este caso, mientras que el resto de los grupos le ofreció su apoyo para arbitrar medidas legislativas de "tolerancia cero" al maltrato en los cuarteles. El socialista López Garrido aprovechó su tiempo para ofrecer una interpretación de lo que había expuesto poco ante el popular Ignacio Astarloa. Llegó a la conclusión de que el PP no había pedido la dimisión del ministro. En su último turno, el portavoz popular le aclaró que si su partido ya había pedido la dimisión de Alonso tras el escándalo de las detenciones ilegales de dos militantes del PP en el caso Bono, ahora pedía la "dimisión al cuadrado".
La mayoría de los grupos fue crítica con el papel jugado por Gómez Arruche, aunque sólo IU-ICV propuso directamente su cese, mientras que ERC consideró que su labor "casa poco" con la anunciada investigación a fondo sobre la muerte de Juan Martínez Galdeano en un cuartel almeriense.