LD (EFE) La delegación española expulsada el domingo pasado por policías marroquíes han decidido regresar a Madrid después de no haber recibido garantías del Gobierno de Rabat de que podrían volver a intentar la entrada en el Sahara Occidental. La decisión se tomó después de una reunión con el cónsul alauí en Las Palmas, Abderramán Leibak, quien les indicó que no intentaran viajar de nuevo a El Aaiún porque "la situación y las condiciones son las mismas que ayer".
Según fuentes de esa delegación, el consulado no les ha comunicado una negativa tajante a su regreso a El Aaiún, pero tampoco les ha proporcionado garantías de que serían aceptados. Los integrantes informarán próximamente sobre el contenido de la reunión en una rueda de prensa.
La expedición, compuesta por representantes de colectivos prosaharahuis, concejales madrileños y periodistas, pretendía visitar El Alaaiún hasta el próximo miércoles para comprobar la situación de los derechos humanos en el Sahara Occidental tras los incidentes registrados en los últimos días entre la policía y el movimiento independentista.
La alcaldesa de San Fernando de Henares, Monserrat Muñoz, una de la integrantes de la delegación, explicó que durante el encuentro con el diplomático se habían aclarado las dudas que las autoridades marroquíes pudieran tener respecto a la "intención de esta delegación de escuchar a todas las partes".
Monserrat Muñoz destacó que "desde el primer momento se hizo llegar a la embajada de Marruecos en Madrid nuestra voluntad de vernos con los responsables políticos de El Aaiun", incluidos responsables marroquíes, ya que se les había pasado "por escrito el formato de la visita".
Sólo parlamentarios
En declaraciones a EFE, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, indicó que había obtenido de Marruecos garantías para que una delegación parlamentaria española con representantes de todos los grupos visite libremente el Sahara Occidental en los próximos días.