(Libertad Digital) Según ha informado este jueves el diario ABC, varios miembros del grupo entraron a la iglesia y se le emprendieron con los equipos de calefacción y aire acondicionado que habían sido instalado apenas unas horas antes del suceso.
No contentos con esto, los violentos dejaron numerosas pintadas en las paredes con insultos a los vecinos católicos y a la propia Iglesia. Entre los símbolos que se encontraron había una estrella roja y una cruz invertida.
Sin embargo, no se trata de hecho aislado en la localidad madrileña. El párroco de Santa Mónica dijo que la Custodia de la iglesia no había sido venerada en la calle hasta este año ya que muchos tenían miedo. Además, dijo que muchos fieles no se habían atrevido a regresar al templo por miedo a las posible represalias y reveló que no es la primera vez que un ataque similar ocurre. En la misma iglesia, unos desconocidos profanaron el sagrario y dejaron otras pintadas.