L D (EFE) Preguntado sobre eventuales contactos entre el Ejecutivo español y ETA, Otegi responde: "Lo único que nosotros sabemos es lo que la propia ETA ha declarado que está intentando abrir un canal de comunicación con el Gobierno español".
"No sabemos en qué consiste este intento. Si el Gobierno quiere un guión sin lucha armada, tendrá que hablar con ETA sobre ese guión", añade. La organización terrorista ETA aseguró el 2 de abril que estaba "intentando abrir" una vía negociadora con el Gobierno español, aunque admitió que "hoy por hoy no hay en marcha ningún proceso de negociación" con el Ejecutivo.
En otro momento de la entrevista, Otegi es preguntado por qué Batasuna no condena la violencia de ETA para salir de la ilegalidad. Otegi contesta que "una condena semejante tiene un carácter moral y no político" y "nosotros somos un partido político; queremos que se solucionen los asuntos, pero no condenamos". "Imagínese que sí diéramos ese paso... no lo usarían para poner en marcha un verdadero proceso, sino para decir que se ha solucionado el problema", añade.
Otegi asegura que "para nosotros sería relativamente fácil condenar, pero le prestaríamos un mal servicio a la solución del conflicto, ya que parte de nuestro entorno calificaría una condena así como una humillación".
"No sabemos en qué consiste este intento. Si el Gobierno quiere un guión sin lucha armada, tendrá que hablar con ETA sobre ese guión", añade. La organización terrorista ETA aseguró el 2 de abril que estaba "intentando abrir" una vía negociadora con el Gobierno español, aunque admitió que "hoy por hoy no hay en marcha ningún proceso de negociación" con el Ejecutivo.
En otro momento de la entrevista, Otegi es preguntado por qué Batasuna no condena la violencia de ETA para salir de la ilegalidad. Otegi contesta que "una condena semejante tiene un carácter moral y no político" y "nosotros somos un partido político; queremos que se solucionen los asuntos, pero no condenamos". "Imagínese que sí diéramos ese paso... no lo usarían para poner en marcha un verdadero proceso, sino para decir que se ha solucionado el problema", añade.
Otegi asegura que "para nosotros sería relativamente fácil condenar, pero le prestaríamos un mal servicio a la solución del conflicto, ya que parte de nuestro entorno calificaría una condena así como una humillación".