LD (EFE) Unidades de la Guardia Nacional iraquí, secundadas por fuerzas estadounidenses, capturaron durante la madrugada de este sábado a 130 terroristas en los aledaños de la ciudad santa chií de Kerbala. En la redada participaron helicópteros artillados que ayudaron a cercar a los sospechosos, algunos de los cuales son mercenarios extranjeros, árabes e islámicos, que portaban documentos de identidad iraquíes falsos.
Una fuente del Ministerio de Defensa de Irak informó de que "la segunda División del nuevo Ejército iraquí, apoyado por la fuerza nacional, lanzó una redada en diferentes partes de la provincia de Kerbala, arrestó a 130 sospechosos, y se incautó de una gran cantidad de armas y explosivos". Añadió que la operación se puso en marcha gracias a la información proporcionada por los servicios secretos, y permitió decomisar gran cantidad de explosivos, armas, municiones y material para fabricar tres coches bomba.
Los terroristas extranjeros, en su mayoría pakistaníes y afganos, han pasado a disposición del Ministerio de Defensa puesto que se descubrieron planes para atacar a Kerbala, ciudad situada a unos noventa kilómetros al suroeste de Bagdad.
Por otra parte y en un comunicado del mando militar estadounidense, al menos dos de sus soldados murieron y dos más resultaron heridos al estallar un coche-bomba junto a un patrulla del Ejército de EEUU en un área del sur de Bagdad, informó el mando militar en un comunicado. El texto añadía que el atentado, perpetrado al parecer por un suicida, está aún bajo investigación, y no facilitaba otros detalles.