L D (EFE) El fallecido, cuya identidad responde a las iniciales A.L.G., de 53 años, trabajaba como vigilante de seguridad en una fábrica. Poco después de la agresión un policía de servicio en la zona acudió al lugar de los hechos alertado por los ruidos y avisó a la Policía Nacional de Torrejón de Ardoz. Cuando los servicios de emergencia acudieron al lugar sólo pudieron certificar la muerte del vigilante.
Paralelamente, agentes de Policía detenían en las inmediaciones al supuesto asesino, que no llevaba documentación. Algunos testimonios han apuntado que podría ser de nacionalidad ucraniana aunque este dato está sin confirmar.