(Libertad Digital) El PP ha exigido una reunión urgente de la Comisión 11-M y la comparecencia del actual director del CNI, Alberto Saiz, y de su antecesor, Jorge Dezcallar, para que aclaren si el directivo del PSOE asturiano, Fernando Huarte, que visitó al terrorista Abdelkrim Benesmail en prisión, pertenecía a los servicios de inteligencia.
El PSOE rechazó la petición de los populares, calificó como "disparate" que el PP pretenda la comparecencia de un terrorista ante la comisión y consideró "inútil" pedir explicaciones a los responsables del CNI, ya que, según justificaron, no podrían desvelar datos sobre sus colaboradores. También los grupos parlamentarios de ERC, PNV e IU-ICV se mostraron contrarios a reabrir las comparecencias, mientras que CiU anunció que no votará en contra.
El PSOE rechazó la petición de los populares, calificó como "disparate" que el PP pretenda la comparecencia de un terrorista ante la comisión y consideró "inútil" pedir explicaciones a los responsables del CNI, ya que, según justificaron, no podrían desvelar datos sobre sus colaboradores. También los grupos parlamentarios de ERC, PNV e IU-ICV se mostraron contrarios a reabrir las comparecencias, mientras que CiU anunció que no votará en contra.
Conviene recordar que los responsables del CNI ya acudieron en el pasado a la comisión de investigación, esta vez a petición del PSOE. La opinión de los socialistas cambia ahora que el PP exige explicaciones sobre la posible relación de Huarte con los servicios de inteligencia desde 1992, época en la que el CESID estaba regido por Emilio Alonso Manglano. Este extremo no ha sido ni confirmado ni desmentido por el Gobierno, el PSOE ni el propio centro de inteligencia.
Mientras su comparecencia ha sido vetada por su partido en el Congreso, este miércoles El Comercio de Gijón publicaba una entrevista con el presidente de la Asociación de Amigos del Pueblo Palestino Al Fatah en la que éste negaba la mayor: "Me están hundiendo; no he sido ni colaborador ni informador ni espía".
"Niego rotundamente que yo sea un espía. No tengo ninguna vinculación ni con el CNI ni con otros países", ha dicho el responsable de seguridad del PSOE de Gijón, que atribuye las últimas informaciones sobre su persona a una "persecución" hacia su partido. "¿Cómo no voy a estar afectado? Llevo muchos años trabajando con sectores árabes y las informaciones no hacen otra cosa que perjudicarme", señaló Huarte, que afirmó que no tiene ningún problema en que se revelen las charlas que mantuvo con el terrorista Benesmail en la cárcel de Villabona. Sobre la posible desaparición de las grabaciones de los encuentros, el supuesto espía dijo: "Si se han destruido o han desaparecido no es un problema mío".
Sin embargo, El Mundo se reafirma en sus informaciones. Para aumentar la confusión, el propio Huarte, en conversación telefónica con elmundo.es, ha negado haber concedido una entrevista a El Comercio y se ha limitado a referirse a las declaraciones que hizo la semana pasada a la agencia EFE. En el comunicado enviado a la agencia pública aseguró que sus encuentros con el terrorista argelino se produjeron por razones "humanitarias" y como presidente de la Asociación de Amigos del Pueblo Palestino. Fuentes del Comercio han confirmado a Libertad Digital la veracidad de las declaraciones de Huarte, independientemente del formato en el que fueran hechas.
Respecto a la Asociación de Huarte, El Mundo informa en su edición de este miércoles de que "en mayo de 2004 su ONG recibió del Ayuntamiento de Gijón una subvención de 20.000 euros para el envío de material hospitalario" a Palestina. Sin embargo, El Mundo dice que desde el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe aseguran que nunca ha tenido actividad ni miembros activos y ni siquiera está inscrita en el registro de ONG. Asimismo, la información desvela que otros miembros de asociaciones proárabes asturianas coinciden en que, en los últimos años, tan sólo han visto a Huarte en una o dos ocasiones como presidente de la Asociación Al Fatah