(Libertad Digital) Jamal Zougam, en la cárcel por el 11-M, era amigo del número dos de la célula de Al-Qaeda en España, Amer Azizi, un marroquí casado con una española que vivió en Madrid, luchó en Afganistán y está huido de la justicia española. Una vez que fue detenido en Turquía, Azizi llevaba el pasaporte de Zougam. Hasta el 11 de marzo, Zougam fue un durmiente de Ben Laden en España.
Según publicó el miércoles 7 de abril el Wall Street Journal, Azizi sería una pieza clave en los atentados de Al-Qaeda y el encargado de traer la "yihad" a Europa. Amer Azizi se fugó de España en octubre de 2001, dos semanas antes de que la policía española arrestara a una docena de terroristas de una célula de Al-Qaeda en España sospechosos de ayudar a los terroristas del 11 de septiembre de 2001. Azizi salió del país previo arreglo del envío de su mujer a Marruecos. Al parecer, Azizi salió hacia Irán vía Milán. Durante el arresto de la célula terrorista en noviembre de 2001, la Policía española registró el apartamento de uno de los detenidos por los atentados de Madrid, Jamal Zougam. En la investigación se encontró el teléfono de Azizi, que tiene contacto directo con el líder de los terroristas, Zarqawi.
Hasta ese momento, Sarhane "el tunecino", que se suicidó en Leganés junto a otros terroristas responsables del 11-M, era el principal sospechoso de organizar los atentados. Según la información del WSJ, la Policía pensó que sería Azizi el cerebro de los atentados. Amer Azizi, que tiene conexiones personales con la dirección de Al-Qaeda, vivió en España al menos durante diez años. Conoce de cerca la cultura y la manera de funcionar en España que se requiere para organizar de manera tan precisa los atentados del 11-M que derrumbaron al Gobierno aliado de Estados Unidos. El WSJ informaba, en declaraciones de un oficial antiterrorista del Gobierno español, "que, sin duda, Azizi es más importante que el tunecino. Azizi fue el cerebro, el vínculo entre los marroquíes y Al-Qaeda".
Amer Azizi es la conexión de los grupos terroristas islámicos en el Norte de África, Europa y Asia, según documentos judiciales. Se trata de un entrenado "muyahidin" que luchó en Afganistán y más tarde se estableció en Madrid, donde dirigió las relaciones de trabajo con los facciones radicales del Islam en España, como el imam Abu Bakar. Según las investigaciones, Azizi mantuvo diversas conversaciones telefónicas y reuniones con miembros de las células terroristas de Al-Qaeda en España, Indonesia, Marruecos, Irán, Afganistán y Francia entre los finales de los 90 y su huida de España en 2001. Es cuando llega a Irán y recorre la frontera de este país con Afganistán cuando entra en contacto con Zarqawi, líder de Al-Qaeda y cerebro-organizador de los atentados del 11 de septiembre. El líder de Al-Qaeda controla las principales rutas clandestinas entre Irán y Afganistán.