LD (EFE) El texto fue aprobado con 180 votos a favor (PSOE, CC, ERC, IU-ICV, y CHA), con 162 en contra (PP, CiU, PNV y todos los partidos del Grupo Mixto -NB, EA y BNG-, salvo el CHA).
En su intervención ante el Pleno, el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, defendió que estos presupuestos son los "adecuados para la situación actual" y, por lo tanto, no hay "razones macroeconómicas" que justifiquen el rechazo a estas cuentas.
Posteriormente, en declaraciones a los periodistas, el vicepresidente reconoció que el veto del Senado plantea algunos "problemas prácticos" como la revalorización de las pensiones o de algunos indicadores como el Salario Mínimo o el Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples (IPREM), modificaciones que hasta ahora se realizaban mediante enmiendas pactadas en la Cámara Alta, y que este año, por primera vez en la historia, han sido rechazadas.
En el caso de las pensiones, Solbes recordó que el Gobierno aprobará este jueves un Decreto Ley para que los pensionistas "no pierdan ni un sólo céntimo" por el aumento de la inflación de 2004. Sobre a los "errores materiales" que pueda contener el texto del proyecto, precisó, se aplicará "el mismo procedimiento que se aplicó en el pasado y serán subsanados por la Cámara".
En defensa de los presupuestos, dijo que la situación actual de la economía y su evolución son "claramente favorables" y recordó que, en ese contexto, el Gobierno prevé una tasa de crecimiento para 2005 del 2,9 por ciento. Además, Solbes volvió a defender la "voluntad negociadora" del Gobierno en la tramitación de estos presupuestos pero recordó que esta capacidad "tiene unos límites" impuestos por la UE y por los "márgenes de la economía española".
En su intervención ante el Pleno, el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, defendió que estos presupuestos son los "adecuados para la situación actual" y, por lo tanto, no hay "razones macroeconómicas" que justifiquen el rechazo a estas cuentas.
Posteriormente, en declaraciones a los periodistas, el vicepresidente reconoció que el veto del Senado plantea algunos "problemas prácticos" como la revalorización de las pensiones o de algunos indicadores como el Salario Mínimo o el Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples (IPREM), modificaciones que hasta ahora se realizaban mediante enmiendas pactadas en la Cámara Alta, y que este año, por primera vez en la historia, han sido rechazadas.
En el caso de las pensiones, Solbes recordó que el Gobierno aprobará este jueves un Decreto Ley para que los pensionistas "no pierdan ni un sólo céntimo" por el aumento de la inflación de 2004. Sobre a los "errores materiales" que pueda contener el texto del proyecto, precisó, se aplicará "el mismo procedimiento que se aplicó en el pasado y serán subsanados por la Cámara".
En defensa de los presupuestos, dijo que la situación actual de la economía y su evolución son "claramente favorables" y recordó que, en ese contexto, el Gobierno prevé una tasa de crecimiento para 2005 del 2,9 por ciento. Además, Solbes volvió a defender la "voluntad negociadora" del Gobierno en la tramitación de estos presupuestos pero recordó que esta capacidad "tiene unos límites" impuestos por la UE y por los "márgenes de la economía española".
Razones para votar en contra
En el turno de los grupos, Vicente Martínez Pujalte (PP) criticó los Presupuestos porque "no se sabe qué cifras se están votando y cómo se ha llegado a ellas", además de que estas cuentas no garantizan el crecimiento económico. Jordi Vilajuana (CiU) justificó su rechazo a los presupuestos por "coherencia" con la enmienda a la totalidad presentada cuando se debatieron en el Congreso y porque estas cuentas tienen poca ambición en gasto social y escasas inversiones para Cataluña.
Pedro María Azpiazu (PNV) advirtió de que el veto del Senado muestra la debilidad del Gobierno y criticó la falta de voluntad negociadora del Gobierno y que los presupuestos no apuesten por las inversiones en Euskadi. Francisco Rodríguez Sánchez (BNG) criticó que los Presupuestos consideran a Galicia como periferia y no resuelven las necesidades de la región, además de ser una continuidad de la política del PP.
Pedro María Azpiazu (PNV) advirtió de que el veto del Senado muestra la debilidad del Gobierno y criticó la falta de voluntad negociadora del Gobierno y que los presupuestos no apuesten por las inversiones en Euskadi. Francisco Rodríguez Sánchez (BNG) criticó que los Presupuestos consideran a Galicia como periferia y no resuelven las necesidades de la región, además de ser una continuidad de la política del PP.
Desde EA, Begoña Lasagabaster rechazó el proyecto porque, pese a que aumenta el gasto social, sigue siendo muy bajo respecto al resto de la UE, y porque las inversiones en infraestructuras en el País Vasco son insuficientes. Utxue Barkos (Nafarroa Bai) dijo que la formación navarra integrada en el Grupo Mixto rechazaba las cuentas del Estado para 2005 porque penalizan a la Comunidad Foral, entre otras razones.