LD (EFE) A través de sendos comunicados a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y a los medios de comunicación, Sacyr se compromete a, en el caso de que la operación finalmente prospere, mantener al actual equipo directivo y a su presidente, Francisco González.
El grupo constructor asegura en sus comunicados que esta operación es una "iniciativa propia" y "puramente empresarial", "en el marco de una economía libre y de mercado y desde el máximo respeto a la legislación vigente y a las normas del buen gobierno corporativo".
Según el grupo constructor, su intención de convertirse en el máximo accionista del segundo banco español busca favorecer a los accionistas, empleados y clientes de ambas sociedades e incrementar su valor bursátil. Además, Sacyr asegura que pretende reforzar la presencia en España y Europa del BBVA –"entidad clave en el sistema financiero español"–, manteniendo al actual equipo ejecutivo de la entidad, "que ha demostrado su sobrada capacidad profesional".
La entrada de Sacyr en el BBVA beneficiará, en opinión del grupo constructor, al Consejo de Administración de la entidad bancaria, porque le proveerá de "un núcleo de accionistas solventes que dote de estabilidad a su capital". La operación, que según Sacyr también es positiva para "el conjunto de la economía del país", se llevaría a cabo mediante una ampliación de capital por 1.100 millones de euros.
Si fuera necesario para completar la suscripción, está previsto que se cubran al menos 700 millones de euros (un 0,5 por ciento adicional) por parte de miembros del consejo, concretamente de sus accionistas Juan Abelló y Demetrio Carceller.
El grupo constructor asegura en sus comunicados que esta operación es una "iniciativa propia" y "puramente empresarial", "en el marco de una economía libre y de mercado y desde el máximo respeto a la legislación vigente y a las normas del buen gobierno corporativo".
Según el grupo constructor, su intención de convertirse en el máximo accionista del segundo banco español busca favorecer a los accionistas, empleados y clientes de ambas sociedades e incrementar su valor bursátil. Además, Sacyr asegura que pretende reforzar la presencia en España y Europa del BBVA –"entidad clave en el sistema financiero español"–, manteniendo al actual equipo ejecutivo de la entidad, "que ha demostrado su sobrada capacidad profesional".
La entrada de Sacyr en el BBVA beneficiará, en opinión del grupo constructor, al Consejo de Administración de la entidad bancaria, porque le proveerá de "un núcleo de accionistas solventes que dote de estabilidad a su capital". La operación, que según Sacyr también es positiva para "el conjunto de la economía del país", se llevaría a cabo mediante una ampliación de capital por 1.100 millones de euros.
Si fuera necesario para completar la suscripción, está previsto que se cubran al menos 700 millones de euros (un 0,5 por ciento adicional) por parte de miembros del consejo, concretamente de sus accionistas Juan Abelló y Demetrio Carceller.